Capítulo 1: Como todo comenzó.

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"Aunque bien sé que no hay hechizos en el mundo que puedan mover y forzar la voluntad, como algunos simples piensan, que es libre nuestro albedrío y no hay yerba ni encanto que le fuerce."

Miguel de Cervantes.

Es hermoso ver en las calles de Nueva York a las personas pasear, unas van como yo; simplemente observando, otras van a toda prisa por tratar de llegar temprano o a tiempo a sus centros de trabajo o a cualquier otro lugar, otras van con sus parejas, quién sabe a dónde, puede ser a tomar un helado, un café o a un cita romántica. Lo malo de todo esto es que Nueva York es una de las ciudades en las que más emigrantes e indigentes hay y es muy feo ver a todas esas personas tiradas en lo callejones.

Entre mis pensamientos choco abruptamente con algo que puedo identificar como más pequeño que yo y para ser así tendría que ser algo realmente pequeño.

Cuando miro hacia abajo veo a una niña de más o menos 5 o 6 años, cabellos rubios, largos y rizados; y muy asustada, la separó del tumulto para arrinconarnos a una pared.

-Hola nena. ¿Donde está tu mamá? .

-No lo se. -Habla inocente y asustada.

-Bien. ¿Como te llamas? . -Tomo su mano para que se sienta un poco más segura.

-Mavis.

-Ok. ¿Que edad tienes preciosa? .

-7 años.

Vaya, al parecer mi cálculo fallo.

-¿Donde fue la última vez que viste a tu mami? .

-Ella me dejo en el parque mientras yo jugaba, se montó en su coche y se fue, luego yo salí a buscarla porque a lo mejor se había perdido y por eso no regreso por mi.

Oír esto de una persona tan inocente como ella me parte el corazón. ¿Como una madre puede hacer eso con su propia hija? . Está claro que está mujer hizo esto de la manera más intencional del mundo.

-Esta bien, no te preocupes, yo te voy a ayudar.

Llevo a la niña a la comisaría más cerca que hay posible en la zona y me quedo esperando fuera mientras le hacen algunas preguntas, me gustaría haber estado ahí con ella pero no me dejaron pasar, debe tener mucho miedo la pobre Mavis y también debe ser muy duro que tú madre no te quiera y te deje abandonada en un parque a tu suerte.

-¿Señor, que va a pasar con la niña? . -Le pregunto a un policía que va saliendo de la sala de interrogatorio.

-Contactamos a la madre, fue demasiado fácil, al parecer no pensó bien las cosas.

-¿Se la van a devolver? . -Digo preocupada. -Esa niña no está segura con esa mujer, se puede quedar conmigo hasta que...

-Señorita no se preocupe, no la devolveremos con su madre, al contrario, la niña irá a un orfanato ya que no tiene más ningún familiar que se pueda hacer cargo y a su madre la meteremos a la cárcel por el abandono de una menor.

-Pero señor no hay necesidad de que la niña vaya a un orfanato. -No se porque estoy defendiendo tanto a esa niña pero de alguna manera u otra me importa. -Ya le dije, me puedo quedar con...

-A ver señorita Sheridan, por favor, usted es menor de edad.

-Por un año solamente comisario.

-Ese año hace la diferencia, si quiere quedarse con esa niña espere a que cumpla su mayoría de edad y le recomiendo que tenga un lugar estable donde vivir, al igual que un trabajo y un esposo.

Mi familia 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora