La Segunda Oportunidad Del Villano Escoria~

Capítulo 40: Una vida y veinte años

Obscenidad desvergonzada, saltar capitulo si te hace sentir incómodo.
.
.
.
.
.
.
.
.

Liu Qingge dejó caer a Shen Jiu en la cama de la habitación. Jadeó, pero se tumbó de espaldas, mirando a Liu Qingge.

Se habían ido las lágrimas y el cansancio en el rostro de Liu Qingge, y ahora lo miraba con un hambre que enviaba rayos de miedo y placer por su espalda.

"Qingge—"

"Li-jie". Unas manos agarraron sus pantalones, los dedos se deslizaron por debajo de la cinturilla y se los bajaron con facilidad.

"¡Li-jie—!" Gimió cuando su dolorida polla fue liberada al aire, su cara roja por la vergüenza. "Espera, p-por favor—"

Liu Qingge capturó sus labios nuevamente, su lengua se deslizó dentro de su boca con facilidad. Manos tocaron a tientas el cuerpo de Shen Jiu, haciéndolo moverse ligeramente por los rastros mordaces que los dedos de Liu Qingge dejaban sobre él. Gimió suavemente en el beso antes de que Liu Qingge se alejara.

"Qué-?"

Observó con fascinación cómo Liu Qingge se quitaba la ropa. Revelando un cuerpo musculoso y atractivo que por lo general solo veía cuando iban a la playa o a las piscinas, ocasionalmente después de que el otro tuviera un entrenamiento duro o un combate de sparring. Shen Jiu se lamió los labios con anticipación, pero detuvo a Liu Qingge cuando intentó besarlo nuevamente.

"¿L-lubricante?" Se puso nervioso cuando Liu Qingge le sonrió, pero se levantó por un momento para abandonarlo e ir a buscar su bolso. "¿Tú... tú viniste preparado?"

"Mingyan".

Liu Mingyan hablaba muy en serio acerca de que Liu Qingge llevaba condones y lubricante para esconderlos en el fondo de su bolso. Aparentemente, sabía que su hermano se rompería un día y sería incapaz de controlarse con Shen Jiu.

"¿Yo puedo?"

Ya estaba sobre Shen Jiu, pateando sus propios bóxers y honrándolo con la vista de su propia erección. Tuvo que volver a mirar a Liu Qingge, pero luego tuvo que encontrar otro lugar para mirar porque la mirada era demasiado intensa.

Sus únicas experiencias sexuales habían ocurrido cuando era un joven adolescente y nunca nada después de eso, ni siquiera la masturbación porque le aterrorizaba. ¿Pero esto? Esto hizo que su corazón se acelerara con anticipación y emoción.

Él quería esto.

"H-haz lo que quieras".

Esperó a que Liu Qingge lo embistiera, lo follara en la cama y lo hiciera gritar. Pero cuando el otro no se movió, se frustró por la falta de más estimulación.

"¿Bien?"

Liu Qingge colocó los artículos junto a ellos y con cuidado colocó sus manos a ambos lados de Shen Jiu, enjaulándolo. Shen Jiu le frunció el ceño, más aún por el hecho de que su polla se contrajo y quería que lo tocara. Se sentiría bien con Liu Qingge. Eso lo sabía, incluso si le dolía, podía adaptarse.