El mayordomo

CAPITULO 21

Luke se sentó en el asiento de copiloto algo nervioso, Charly lo observaba de reojo mientras el beta se arreglaba la camisa, en el curso le habían pedido llevar un delantal para no ensuciarse la ropa, lo demás lo proporcionaban allí.

-Estás muy guapo, pequeño Luke...- sonrió y acarició su cabello – No debes preocuparte por nada, recuerda que yo estaré a diez minutos del lugar, si necesitas algo, puedes llamarme.

-Voy a estar bien, señor Cross...- se puso recto, quería demostrarle seguridad – Las clases serán hasta medio día, hoy nos enseñaran a preparar posters.

-¿Estás preparado? – Luke asintió – Entonces vámonos, no quiero que llegues tarde el primer día.

Luke se puso a tararear la canción que estaba sonando en la radio, algo que hizo muy feliz a Charly, el alfa no dijo nada para que no se avergonzara, hubo un momento en el que el beta se emocionó y comenzó a cantar como si estuviera solo.

-Sigue, pequeño Luke, no me molesta...- le sonrió – Han cambiado la canción ¿Está la conoces? – asintió - ¿Quieres que cantemos juntos? – sus mejillas estaban rojas – Te aviso yo cantó muy mal, mi esposa huía de mi cuando lo hacía – bromeo.

El beta hacia un pequeño bailecito, mientras sujetaba el delantal, cantaba la canción que estaba sonando en su cabeza, para que Charly no se diera cuenta, el alfa lo miraba de reojo con una sonrisa pícara.

-¿Quieres que te apunte a clases de canto? – negó con la cabeza, muy avergonzado - ¿Estás seguro? No me importaría, cantas bastante bien, creo que si vas a clase, mejorarías en pocos meses.

-No me gusta cantar, señor Cross... - se ocultó para que no lo viera – Solo lo hago de vez en cuando, cuanto ayudo a las doncellas, ellas también lo hacen.

-¿Quieres que te compre un tocadiscos para la habitación? Así podrías escuchar las canciones que más te gustan...- no le contesto – O prefieres una radio.

-Las cobayas se asustaran si pongo música en la habitación, les molesta mucho el ruido – jugueteo con sus manos – No creo que puedo ponerlo muchas veces, sería una pérdida de dinero.

-No pasa nada ¿tú lo quieres? – Luke mordió su labio – De alguna marca o color en especial, lo buscaré en el ordenar de Jon, él sabe cómo hacer esas cosas.

-Podemos esperar a mi cumpleaños, has gastado mucho dinero en mi recuperación, las cobayas y el curso, señor Cross...- el alfa sonrió – Puedo esperar, no es algo que necesite ahora.

-Pequeño Luke, pensaba en llevarte a comprarte un traje y ropa para ir a clase...- el beta se tensó – Solo si tú quieres, podemos ir este fin de semana, te dejo unos días para pensarlo.

-No necesito ropa, traje mucha de mi antigua casa, señor Cross.

-Hay algunas prendas que ya están viejas y te vienen pequeñas, es bueno de vez en cuando cambiar tu armario, podríamos pasar el día juntos comprando, lo que quisieras...- sonrió – Han abierto una tienda de trajes, que son bastante modernos, te puede quedar bien alguno de ellos.

-Eso será muy caro, estoy bien con lo que tengo.

-¿Has vuelto a coser algún calcetín roto? Las doncellas me contaron que a veces les pides hilo y aguja para arreglar tu ropa...- el beta mordió su labio – Lo pasaremos bien, si quieres podemos ir a un centro comercial fuera de la ciudad.

-¿Puedo comprarme ropa interior? – asintió, Charly estaba muy feliz – Hay algunos calzoncillos que me vienen pequeños y me hacen daño.

-Entonces los cambiaremos, no te preocupes, pequeño Luke...- se empezó a reír – Eso te hace feliz ¿verdad? Puedes pedirme lo que quieras, yo intentaré ayudarte en lo que necesites.