Un Nuevo Mundo Lascivo.

¡Hermanas, Haciéndolo Por Sí Mismas!

(Link del Autor original: https://archiveofourown.org/users/EvilFuzzy9/pseuds/EvilFuzzy9)

Un nuevo mundo lascivo

EvilFuzzy9

Capítulo 7: ¡Hermanas, haciéndolo por sí mismas!

Texto del capítulo

Fue con una gran cantidad de temor que Naruto retorció su cuerpo fuera del agarre de su madre, sonriéndole avergonzado mientras se agachaba a un lado y trotaba por el pasillo. Las formas de Obi y Mari que murmuraban suavemente y soñolientas colgaban sobre sus hombros y rebotaban (En más de una forma) a medida que avanzaba.

Mina sonrió a la espalda de su hijo que se alejaba, riéndose en voz baja para sí misma.

Mina: "Mm. Qué buen culo", Observó, lamiéndose los labios mientras miraba con lascivia el trasero vestido con pantalones de su hijo. "Definitivamente obtiene eso de Kushina".

Naruto, mientras tanto, se dirigió por el pasillo en busca de la habitación de invitados. Era, por algún extraño capricho del diseño, una de las habitaciones más alejadas de la entrada, al estar en el extremo más alejado de una de las ramas del pasillo de entrada. No caminó con ninguna prisa en particular después de ese esfuerzo inicial, y se acercó al destino después de aproximadamente un minuto de caminata.

Escuchó los gemidos mucho antes de eso.

Karui: "¡Ohhh, señora Kushina...! ¡Sí! ¡Joder, sí! ¡ Sí! "

Omoi: "¡Rómpeme! ¡Rómpeme, por favor, señora!"

Samui: "¡Me estoy muriendo! ¡Oh, mierda! ¡ Esto se siente demasiado bien! ¡Ahhn❤!"

Las mejillas de Naruto florecieron con un tinte rosado, una flor rojiza que brillaba en su rostro. Incluso sin escuchar la mención del nombre de su otra mamá, o reconocer las voces, sus habilidades sensoriales por sí solas dejaron bastante claro lo que estaba pasando allí.

Su madre, Kushina, a veces podía ser muy anticuada. Los Uzumaki eran un clan muy antiguo de gran poder y riqueza que se remontaba mucho tiempo atrás. Durante siglos, a menudo capturaron enemigos vivos en batalla y los adoctrinaron como esclavos. Había sido una práctica muy extendida entre muchos clanes, por supuesto, pero los Uzumaki y sus sellos la habían perfeccionado hasta convertirla en una forma de arte. Las llamadas "Esposas de guerra" eran numerosas entre los Uzumaki más ricos y poderosos, y algunos relatos antiguos hablaban de algunos grandes maestros del clan que tomaron cautivos a más de cien enemigos shinobi en el transcurso de sus vidas.

Naruto siempre había sido un poco escéptico de ese tipo de números y, a pesar de todo lo demás, nunca había estado exactamente dispuesto a esclavizar a los enemigos capturados. Ciertamente, algunos se le habían ofrecido en el pasado, tal vez sintiendo que la vida en la servidumbre sería mejor que la muerte o el castigo a manos de las amantes, pero hasta hoy nunca lo había hecho.

Una parte de él casi se preguntaba por qué había decidido hacerlo ahora, de todos los tiempos.

Esa parte fue rápida y despiadadamente silenciada.

Aún así, Naruto pasó sigilosamente por la habitación, donde su madre, Kushina, evidentemente estaba probando a Samui, Karui y Omoi. Probablemente esto era tanto para afirmar una posición de dominio como para correrse sobre sus cuerpos núbiles.

Sintiéndose un poco vergonzosamente duro por ese pensamiento, Naruto finalmente llegó a la habitación de invitados. Abrió la puerta con bastante facilidad con el pie (Era uno de esos juegos de shoji deslizantes a la antigua), y llevó a Obi y Mari a la cama. Los dejó encima, tirando hacia abajo de las sábanas.