Había muchas cosas que a Louis le gustaban de ser músico.
Primero, tener la posibilidad de escribir sus propias canciones. El proceso creativo y la posterior interpretación siempre le daban la sensación de que completaba un ciclo. La idea de que no dependía de nadie más que de sí mismo para hacer lo que quisiera siempre era gratificante.
Luego, estaban los viajes. Aunque su carrera musical había empezado hace menos de tres años, ya había conseguido hacer sold-out de su primer tour por Estados Unidos, y había conocido muchas ciudades que ni siquiera estaba seguro de cómo pronunciar apropiadamente.
Otra de las cosas que le gustaba, era que podía trabajar con sus amigos. Niall, quien era el guitarrista de su banda, había aparecido en su vida apenas un año antes de que decidiera dedicarse a la música. Habían hecho click inmediatamente, compartiendo no sólo su pasión por el fútbol y los videojuegos sino también por lo que ahora los tenía trabajando juntos, el componer e interpretar.
Luego estaba Liam, su mánager. Aunque a Louis le había costado en un principio formar un lazo de amistad con él, por todas las dificultades intrínsecas que implicaba su relación de trabajo y las distintas personalidades que tenían, dentro del último año habían comenzado a comprenderse mejor, volviéndose Louis un poco más responsable y Liam un poco menos exigente. Un punto medio.
Finalmente estaba Zayn. Louis creía que llamar a Zayn amigo era una subestimación horrible de su relación, así que siempre que tenía que introducirlo en alguna reunión importante o en algún tipo de evento, lo presentaba como su hermano. Zayn era el asistente personal de Louis, principalmente porque nadie lo conocía tan bien como él. Por ende, nadie era capaz de responder tan perfectamente a sus peticiones, anticipar sus necesidades, y por supuesto, tolerar su humor. Habían sido amigos desde que Louis tenía memoria, era una constante en su vida, y facilitaba a Louis cada deber. Desde despertarlo para sus entrevistas, recordarle sus compromisos, planificar sus viajes y, la parte más importante, ayudarlo en sus bromas.
Desde que eran pequeños, a Louis y a Zayn les encantaba jugar bromas a la gente. Partiendo por cosas tan simples como asustarlos o esconderles sus pertenencias, hasta colocar dentrífico en las manijas de los salones de su colegio, para que todo quien las tocara terminara con las manos empapadas de pasta de dientes.
Ahora que eran adultos, y que estaban recorriendo Estados Unidos, por supuesto, sus bromas no podían hacer otra cosa que mejorar. Con la adición de Niall a su proceso de planificación, cada broma era una competencia constante con ellos mismos por demostrar que podían armar un plan perfecto para hacer caer a su siguiente víctima, sin que esta sospechara o encontrara una forma de librarse de ello.
Engañar a algunas personas de su equipo se volvía cada vez más difícil, porque ya llevando meses de conocerlos, se encontraban preparados para cualquier mentira que Zayn, Louis o Niall quisieran poner en ellos. Sin embargo, quien nunca fallaba en caer en sus juegos era Liam.
A veces Louis se sentía un poco mal por todas las bromas que le habían hecho. Él debía tener mucha paciencia para seguir ahí. Pero luego recordaba algún mal comentario, una entrevista que en realidad no quería hacer pero Liam no le dejaba cancelar, o cuando no le permitía salir del hotel a comprar un simple combo en Mc Donalds, y siente la necesidad de gastarle una broma otra vez.
Así que ahí estaban, Niall, Zayn y Louis, reunidos en la habitación de este último para planear su siguiente juego.
—Podemos llamar a su habitación desde aquí, actuamos como la recepción, y le pedimos que baje con sus cosas porque tienen que revisar su pieza por una denuncia de tráfico de drogas —sugirió Zayn. Los ojos de Niall brillaban ante la idea, pero Louis estaba imperturbable.
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Trouble up (in hotel rooms) ⌂ L.S.
Fanfiction-¿Esta no es la habitación 82? -preguntó Louis entonces. Porque estaba confundido, porque ese no era Liam, porque esos ojos verdes serenos pero serios lo intimidaban y porque nunca, en toda su vida, había sentido tanta vergüenza como en aquel moment...