NO CREÍ QUE TE AMARÍA TANTO

¿Quién es?

Mi hermano pequeño abrió la puerta de mi cuarto y se metió conmigo en las cobijas.

—Lucas, no quiero ir a la escuela hoy, dile a mamá que tengo fiebre ¿Sí?

Yo quien estaba apenas abriendo mis ojos, me volteé hacía el otro lado.

—Tienes que ir a la escuela Sebastián, sal de mi cama, tienes los pies fríos

Entonces mi mamá entró a la habitación buscando a mi hermano y lo sacó de la cama para meterlo a bañar con agua fría.

—¡Vamos mijo, así se te quita el sueño!

No pude evitar reírme un poco. Durante el desayuno mi papá se estaba vistiendo para ir a la oficina y se despidió corriendo, él trabaja como abogado en el centro de la ciudad.

—Cepíllate los dientes amor —dice mi mamá— y tú Lucas, termina rápido de comer ¡Ya es tarde!

—Tranquila mamá, tomaré el autobús

—Péinate bien y arregla tu cuello, recuerda que hoy tienes exámen de física, ¿Estudiaste bien?

—Sí mamá... Lo sé, sí estudié muy bien

Ella es muy estricta en esas cosas, aunque eso me molesta mucho...

Antes de salir de casa mi madre me dió dinero para comprar las pastillas de mi padre después de clase, lo malo e que era bastante lejos y llegaría muy tarde.

Últimamente, han Sido días muy aburridos y no es que me queje, me va bien en el instituto, tengo buenos amigos y a mi familia, pero en el fondo siento como si deseara algo más. A mis 17 años solo he tenido una novia y sigo virgen lo que llama mucho la atención en mi clase llena de promiscuos.

(¿Acaso no soy lo suficientemente guapo?... Bueno, no es como si yo fuera feo o algo así, digo... Me cuido, cómo sano y hago ejercicio pero ¿Será suficiente?)

En ese momento la imagen del rostro de Félix pasó por mi cabeza lo que me hizo sacudirla con tal de sacarla.

Al atardecer tomé un autobús hacia el centro comercial y luego de comprar los medicamentos, me compré un café en Starbucks y me dirigí a casa saliendo hacia la calle. Ya era de noche y justo antes de que llegara el autobús, me percaté de que en el parque del otro lado de la calle, Félix vestido de una forma muy extravagante entró caminando, por lo que por un momento pensé en seguirlo pero me retracté al último segundo, me subí al autobús y desde el asiento de atrás pude ver cómo Félix salía del parque junto a un hombre mayor que él, quien tenía su mano en sus hombros.

(¿Quién es?)

Antes de que el autobús arrancara de nuevo pude ver cómo ese hombre tomó de la cintura a Felix y lo manoseó de una forma muy gráfica mientras Félix no hacía nada.

(¡¿Quee?!)

El bus arrancó conmigo boquiabierto.