𒊹︎︎︎𝐼𝑛𝑠𝑡𝑖𝑛𝑡𝑜𝑠𒊹︎︎︎ (𝑹𝒆𝒏𝒌𝒂𝒛𝒂/ 𝑲𝒚𝒐𝑨𝒌𝒂)

Capítulo 35

Yui se despertó al sentir frío, viendo el cielo aún oscuro, sin nadie a su alrededor.

Yui: Mami? - Decía sentándose y ver a su alrededor para empezar a llorar -

DemonioX: Qué haces aquí sola niña, a esta hora salen los demonios ~ -Decía un demonio bastante aterrador, lanzándose a devorar a la niña -

Kyojuro corrió de inmediato a decapitar al demonio de un solo tajo cargando a la menor.

Kyojuro: Yui dónde están Akaza y los demás?! - Decía muy preocupado -

Yui: Papi! *Snif* losh sheñores de la reunión *Snif* se llevaron a mi mami y a mish tíos *Snif* - La niña lloraba sin consuelo alguno, pensaba en que ellos asesinarian a los omegas -

Kyojuro: Quiénes Yui?! - Decía demasiado exaltado y preocupado, tanto que no podía pensar -

Yui: El sheñor que da miedo *Snif* y-y el sheñor del gushano. *Snif* - La niña se escondió en el pecho del pilar, estaba muy asustada -

Kyojuro corrió a la finca Rengoku dejando rápidamente a Yui con su padre, no pudo explicar la situación porque se fue corriendo directamente a la finca del albino, era bastante lejos así que se apresuró.

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Al ser las 5 de la mañana el omega lloraba más y más, habían pasado alrededor de 8 horas desde que estaban en ese lugar.

Akaza: E-esto duele c-como la mierda! *Snif* - Decía tratando de contener su llanto -

Daki logró zafarse de las cadenas al tener la piel sudada, además de que la horquilla que tenía en su cabello le sirvió para liberar a su amigo y hermano, abriendo la cerradura de las cadenas, pero aún seguía bastante débil por las grandes y exageradas cantidades de veneno en su cuerpo.

Daki: Akaza-kun debes aguantar hasta más, aún te falta un poco! - Decía tratando de animar al peli-rosa-

Akaza: Me voy a morir aquí! *Snif* - Decía llorando más fuerte - También me preocupa Yui! *Snif* - El peli-rosa pensaba demasiado mientras lloraba -

Sanemi: Por qué lloran tanto y no me dejan dormir?, Parece que ya se quieren morir, verdad? - Decía abriendo la puerta de aquella habitación, viendo como los demonios se habían zafado de las cadenas, además de que estaban cerca del peli-rosa que lloraba y gritaba - Qué espectáculo están haciendo? - Decía acercándose lentamente a ellos empuñando su katana -

Gyutaro: Largate maldito. - Decía viendo al albino a los ojos serio -

Sanemi: Estúpido. - Decía pateando al peli-verde apartandolo del lado del peli-rosa para ver lo que sucedía - Estás pariendo no?, Igualmente voy a matarlos. - Decía sonriendo -

Akaza: SI NOS VAS A MATAR HAZLO DE UNA MALDITA VEZ! *Snif* - Decía llorando y gritando por el dolor apretando la mano de la peli-negra -

Sanemi: No, quiero ver cómo sufren aquí, un lugar frío, sucio, sin comida ni donde dormir, quiero ver su agonía y desesperación antes de matarlos. - Decía sonriendo sadicamente -pensaba matarlos con la luz solar, pero este idiota es inmune a ella, así que debería dejarlos un par de días aquí, será lo mejor del mundo verlos agonizando. - Decía viendo al peli-rosa con sonrisa -

Gyutaro: Eres un desgraciado, miserable y patético. - Decía tocando su vientre -

Obanai: Sanemi ven a dormir... - Decía frotando sus ojos en la puerta de esa habitación -

Daki: Déjanos en paz, maldito estúpido! - Decía levantándose para patear los testículos del albino con toda la fuerza que tenía en ese momento, haciéndolo gruñir, este se enojó tanto que tomó a la mujer por el cuello, clavando su katana en el pecho de la demonio, haciéndole una gran herida que le costaría regenerar-