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- Seo Changbin, tenemos que hablar - dijo el mayor del grupo entrando a la habitación del nombrado y cerrando la puerta tras él

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- Seo Changbin, tenemos que hablar - dijo el mayor del grupo entrando a la habitación del nombrado y cerrando la puerta tras él.

- Juro que fue Minho hyung quien se comió la última galleta que hizo Seungmin, to no tengo nada que ver - habló rápidamente en de hebras más oscuras.

- ¿Que? No venia por eso, pero gracias por la información. Bueno, a lo que venía ¿que le hiciste a Jeongin? Hace días que está raro, siempre está en su mundo y cuando le pregunto en qué pensaba o no me responde o me dice que no lo recuerda. Y seré viejo, pero no tonto.

- ¿Porqué me preguntas a mi? Es más probable que Felix lo haya tramado con sus fanfics minchaeng que yo, me ofendes Bang. - dijo el de hebras negras falsamente ofendido.

- Tu y yo sabemos por qué te pregunto a ti, además, Felix a quien trauma es ha Hyunjin, hace rato lo vi llorando por un fanfic de Felix. A veces me preocupan, pero ese no es el caso ¿que le dijiste, barra, hiciste? - preguntó el castaño curioso.

- Nada importante, el me dijo que me quería dar y no la hora y yo le dije lo mismo. No es nada - dijo el de menor edad despreocupado.

- ¿Como que no es nada? Jeongin es medio lento para estas cosas, sabes que aún no las entiende del todo. - Le medio regañó el mayor.

- Chris, Jeongin es lento para lo que le interesa y el sabe más que tú y que yo, así que legalmente no hice nada.

- Bueno, pero habla con el, no me gusta que se vaya tanto a quien sabe que parte de su rara mente.

- Esta bien, hablaré con él. - Le tranquilizó el menor.

El de hebras negras vió como el mayor salía por la puerta y la dejaba abierta. Un Jeongin curioso se asomó por esta, sorprendiendo al mayor.

- ¿Jeongin? ¿Que pasó? Puedes pasar, es como tu segunda habitación, ya sabes. - dijo el mayor.

Jeongin como niño pequeño que acaba de ser regañado por sus padres, entra tímidamente al cuarto del mayor y cierra la puerta detrás de él.

- ¿Estás bien? - pregunta preocupado el de hebras negras, recibiendo un asentimiento por parte del menor.

- Hyung ¿puedo pedirle algo?

- Claro innie, lo que sea. - Le alentó el mayor.

- ¿Puede... - el menor pareció pensárselo dos veces , pero sacudió la cabeza y siguió hablando- es una tontería olvidelo.

El de hebras blancas se dio la vuelta para salir de la habitación, pero Changbin fue más rápido y lo detuvo antes de que abriese la puerta, dejando a Jeongin entre la puerta y su anatomía.

- ¿ Que me ibas a pedir? - insistió suavemente el mayor.

- Nada, no es nada ... - dijo el menor intentando no tartamudear.

- Jeongin, no me mientas - habló claro el contrario - si no quieres decírmelo directamente, busca otra forma de contármelo ¿bien?

Jeongin asintió mientras notaba como su mayor inconscientemente se pegaba más a él.

-  Yo... , quiero que usted y yo ....

- Que quieres que hagamos, pequeño - habló suave el mayor.

- Esto.

Jeongin se abalanzó sobre Changbin, besando su labios en una desesperada busca de contacto, de ese contacto que tanto ansiaba.

Changbin no tardó el corresponderle, pero debido a la inexperiencia del menor, ambos se separaron.

- Lo siento, no debí... - intentó seguir hablando el menor, pero no pudo, ya que los labios contrarios volvieron a impactar contra los suyos.

《 Tal vez después de todo sí podamos estar juntos》

《 Tal vez después de todo sí podamos estar juntos》

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𝙿𝚒𝚛𝚞𝚕𝚎𝚝𝚊𝚜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora