Yo,gitana...

El mensajero.

La historia de la anciana aun daba vueltas en mi cabeza y no me dejaba dormir,presentia que algo estaba por ocurrir y honestamente no me gustaba esa sensación asi que decidí salir de la tienda para caminar y despejar mi mente,como siempre Lluvia me seguía mientras hacia mi camino al lago.
-Hola cariño, tampoco puedes dormir?. También tuviste pesadillas con la historia de La anciana? Sabes Lluvia,tengo un mal presentimiento.- Le dije mientras me sentaba en una piedra y Lluvia solo se quedo ahí de pie a mi lado- Siento que...no lo se Lluvia solo siento una gran opresión en mi pecho y tengo...-En ese momento escuche ruidos al otro lado del lago,Lluvia empezo a inquietarse y yo me puse de pie,alerta a cualquier cosa que viera moverse en la oscuridad,escuche un ruido a mi espalda asi que desenfunde rapidamente mi pistola y le apunte al causante del ruido,que no resulto ser mas que un niño.
-Lo siento mi señora,no queria asustarla.
-Esta bien,que pasa??
-Su padre me manda a avisarle que el jefe de la aldea del sur ya a llegado.
-Gracias,ire en un momento.
El pequeño se alejo no sin antes darme una inclinacion de repeto.
El jefe de la aldea del sur era un buen amigo de mi padre,habian crecido juntos hasta que se separaron por zonas cada aldea era llamada por los puntos cardinales,la nuestra era el epicentro, digamos que aqui es donde los gitanos se derivaban ya que aqui estaba el rey,sin mas me dirigí al campamento con Lluvia a mi espalda. Al llegar un grupo de 10 hombres vestidos de negro con el símbolo del agua en sus espalda,al oirme todos se giraron a verme.
-Oh aqui estas mi korítsi- dijo mientras me acercaba a ellos- Mira él es Kavi,del que te hable,es jefe de la aldea del sur.
Kavi,ella es mi unica hija Norah.
-Es un honor al fin conocerte Norah,tan hermosa como tu madre.-dijo mientras hacias una reverencia.
-El honor es mio,al fin conocer al complice de travesuras de mi padre.
Todos rieron ante eso,mientras hacia mi reverencia.
-Bueno,quiero presentarte a mi hijo,Aaron,tambien es mi único hijo.

Al levantar la mirada me quede hipnotizada el ese verde profundo que me veia fijamente.