⠀⠀O1O | OUR PHILLIAS

2.5K 252 35
                                    

—Que me gustas —confesó, completamente perdido en la profundidad de los ojos de Dick, quien le miraba con diversión. Jason se percató de lo que acababa de decir, poniéndose rojo de inmediato—. Y-Yo... quiero d-decir... s-sí, eh... m-me gustas... u-un poquito...

Dick río.

—¿Sólo un poquito? —preguntó, haciendo un adorable puchero, que hizo tambalear la expresión de Jason. "Joder, es demasiado adorable... ¿Estará mal que me lo quiera follar ahora mismo?", pensó Jason, mordiéndose el labio inferior— Porque tú a mí me gustas mucho, Jason...

El menor sale de su ensoñación, mirando sorprendido a Dick.

—¿E-En serio? —Dick asiente, convencido. Jason sonríe, pero entonces recuerda algo, y su sonrisa se borra— Pero... ¿te gusto yo o... mi polla? —la expresión de Dick pasa de ser sonriente a avergonzada en menos de cinco segundos. Sus mejillas se ponen rojas por completo, el color llegando a sus orejas también— Anoche dijiste que estabas enamorado de mi "gran amigo" —relata Jason, haciendo comillas con sus dedos.

Dick abre los ojos desmesuradamente.

—¡¿Yo dije eso?! —exclama, completamente abrumado.

—¿No te acuerdas? —inquiere Jason, frunciendo el ceño.

—¡Claramente no! —grita Dick, cubriéndose la cara con las manos.

—P-Pero... te acuerdas de lo que pasó... entre nosotros...

—Bueno, no es algo que se pueda olvidar con facilidad, ¿sabes? ¡Follé en la cocina con el chico que he estado persiguiendo desde hace tres semanas! ¿Cómo pretendes que me olvide de eso?

Dick se veía bastante alterado, haciendo preocupar a Jason.

—N-No debes sentirte mal. No es la primera vez que me dices algo así —intenta consolarle Jason, haciéndole sentir peor.

—Ah, mierda —Dick suspira pesadamente. Se levanta del regazo de Jason y se deja caer a su lado en la cama—. Ya entiendo porque crees que mis sentimientos no son reales sino que van dirigidos a tu pene...

—Y-Yo no dije eso...

—Lo insinuaste —le acusa Dick, señalándolo acusadoramente. Jason no responde y Dick suspira, nuevamente—. Yo también tengo un problema...

—Filia —interrumpe Jason.

—¿Eh?

—Tú no tienes un problema. Tienes una filia —le hace saber el menor—. No estoy seguro de cómo se llama, pero la tienes. No puedes hacerlo con hombres que tengan el miembro pequeño porque no sentirás placer... porque te gustan los miembros grandes —Dick quiso decir algo... pero, ¿Qué podría decir? Era verdad, pero, que se lo dijeran tan directamente le causaba vergüenza. Le hacía quedar como un goloso y cosas peores—. N-No creo que sea algo malo —murmura Todd, jugando con sus dedos—. Yo tengo varias.

—Pero tú eres un sátiro.

—No es necesario que me lo recuerdes —Jason rueda los ojos.

—A ver, ¿y cuáles son las tuyas? —inquiere Dick, poniéndose cómodo. Jason lo mira estupefacto.

—¿En serio quieres hablar de mis filias? Podríamos tardarnos toda la mañana —le hace saber, alzando las cejas.

—No tengo nada qué hacer, Jason —canturrea Dick, recostando su cabeza en el abdomen de Jason. Este suspira, enarcando una ceja.

—Te diré sus nombres pero no lo que significan —le advierte Jason. Dick bufa.

—Bien, pues lo buscaré yo mismo. —refunfuña Dick, bajando de la cama en busca de su teléfono—. ¿Dónde está mi ropa? —Jason quiere responder, pero la vista del chico casi completamente desnudo ante sus ojos le tiene con la boca seca, incapaz de soltar media palabra— Jason —le llama Dick, sonriendo socarronamente.

—¿E-Eh?

—¿Dónde está mi ropa? —vuelve a preguntar. Jason señala el escritorio junto a la ventana y Dick camina hasta allí, moviendo sus caderas exageradamente. Toma su pantalón y de él, saca su teléfono, acercándose de nuevo a Jason y sentándose sobre su regazo, pero de espaldas. Pudo sentir cuando al menor se le cortó la respiración. Dick se recostó del todo, dejando su espalda en el torso de Jason y removiéndose a propósito—. Puedes empezar, estoy listo.

Jason ríe.

—Eh... Agorafilia —murmura, con las mejillas rojas.

Dick teclea en su teléfono, una vez ha hallado lo que buscaba, le escucha reír.

—Eres realmente un pervertido —lo acusa el mayor—. "Atracción a los espacios abiertos. En el ámbito sexual, se entiende como la excitación producida por la actividad sexual o el exhibicionismo en lugares públicos" —Dick leyó—. Continúa.

—Bondage.

Dick repite el proceso, solo que, esta vez, al leerlo, lo golpea en la pierna.

—"Del inglés "to bind", maniatar. Práctica sexual sadomasoquista en la que uno de los participantes permanece atado" —recita—. De esto me pude dar cuenta, no te preocupes.

—¡No es mi culpa! —exclama Jason, tratando de defenderse— Lo siento...

—Está bien —murmura Dick. Frota su trasero fuerte y lentamente contra la entrepierna de Jason, oyéndole soltar un jadeo—. No estuvo mal, después de todo. Siguiente...

—Estigmatofilia.

—"Atracción producida por el hecho de que la pareja tenga tatuajes, agujereamientos (piercing), sacrificios o cicatrices" —Dick relee un par de cosas, sonrojándose—. Creo... que encontré la mía.

—¿Realmente? —cuestiona Jason, intentando echar un vistazo.

—Falofilia —murmura Dick, leyendo.

—Interesante.

—Eso parece. Continúa.

—Coreofilia.

—"Atracción por la danza y baile erótico" —Dick sonríe ampliamente—. Mmm, esto es interesante considerando que estuve en una academia de danza durante toda mi adolescencia.

—¿En serio? —pregunta Jason, con los ojos brillosos.

—... Jason.

—Dime.

—Acabo de sentirla palpitar —Dick observa el rostro de Jason, quien no es capaz de mirarlo.

—Lo siento...

—No tienes porque —murmura Dick, riendo—. Sigue.

—Eh... Gimnofilia.

—"Excitación producida por la desnudez" —Dick lee, atento.

De repente una sonrisa malvada se asoma por sus labios. Jason, quien no se encontraba mirándolo, lo siente levantarse. Voltea a mirarlo, esperando su siguiente movimiento.

—¿Qué hac..?

Su mandíbula casi toca el piso en el momento en que Dick se deshace de su ropa interior, quedando completamente desnudo y expuesto. Exquisitamente desnudo y expuesto.

—Creo que, en ese caso, no necesito esto —se burla Dick, lanzándole el bóxer que anteriormente tenía puesto a la cara.

Jason no es capaz de articular nada, así que Dick camina deliberadamente lento hacia el escritorio, modelando su bellísimo cuerpo como en una pasarela, frente a los hambrientos ojos de Jason. Deja allí su teléfono y se devuelve a la cama, subiéndose sobre el regazo del menor, nuevamente, mordiéndose el labio inferior al ver el bulto notándose ansiosamente debajo de la tela del pijama del menor.

—¿Tercera ronda? —susurra el mayor, antes de tirar de la ropa interior de Jason al suelo y morder los labios del menor, quien suspiró pesadamente, agarrando las caderas del mayor con firmeza. Dick le ve esbozar una enloquecedoramente sensual sonrisa, mientras sus ojos se oscurecen.

—Tercera ronda.

FALOFILIA ── JAYDICKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora