Un golpe de mala suerte. /DreamSMP/

✵Caida✵

Perspectiva.
Una palabra curiosa sin duda, jugando con los términos de la realidad, haciendo de lo falso creíble y de lo verdadero una mentira. La perspectiva mueve el mundo, rige nuestras ideas y nuestros pensamientos, nos da mente propia y bases en las que apoyarnos, o al menos eso era lo que Dream creía.

✵Caida✵
......

La lava caía lenta pero sin pausa, imponente entre la oscuridad de la obsidiana.
Dream la había estado observando por al menos unas cuantas horas ya, notando como sus ojos adoloridos se quejaban por eso.

Era curioso como habían transcurrido las últimas semanas, intentado mantener su forma física con la pobre alimentación que se le ofrecía, con un silencio casi abrumador, muy diferente a las constantes guerras por las que había pasado el último año. Aunque el silencio se estaba volviendo cada vez más y más aburrido. Tal vez una parte su ser deseaba ser visitado por cualquier miembro del servidor a este punto.

Suspiró abatido, esto no era lo que había planeado. Había planeado la derrota final del villano, había planeado su propio encierro, incluso su estadía allí por al menos unas cuantas semanas, lo que no había planeado era que Sam se metiera en la ecuación perfectamente revisada, sin permitir llamar a Techno o dar instrucciones a Punz, obligándole a permanecer en esa caja de obsidiana durante una cantidad de tiempo imprevisto.
Se sentía molesto por no tener el control de la situación.
Tal vez incluso un poco molesto con Technoblade. Esperaba que él ya hubiera sospechado que algo iba mal. No es que supiera siquiera el plan original, pero conocía a Technoblade y él lo conocía muy bien, demasiado bien. A diferencia del pensamiento popular él y Techno se conocían antes del SMP, incluso de los juegos denominados MCC que se organizaban mensualmente, no, su historia comenzó mucho antes.

Los pensamientos de Dream se vieron interrumpidos cuando los mecanismos de la prisión empezaron a resonar por la estancia, anunciado la llegada de un visitante, haciendo al rubio llevándose por acto reflejo una mano a la máscara para asegurarse de que estaba ahí.

La lava se elevó poco a poco, mostrando a Sam y a Quackity.

-Hace tiempo que no tenía visita.-la voz ronca de Dream se oyó a través del lago de lava.
-Dream, hay algo que tenemos que hablar entre todos los miembros del servidor.
-¿Incluso conmigo?-el rubio soltó un carcajada seca.
-Desgraciadamente.-resopló Sam.

Quackity, vestido de pies a cabeza de netherita, cruzó la lava con lo que parecía ser unas cuerdas gruesas las cuales uso para atar a Dream de forma brusca.

Dream ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar cuando se vio arrastrado a la fuerza a través de la prisión. Su condición física todavía no se había deteriorado demasiado por lo que en el peor de los casos podría defenderse un mínimo.

Cuando salieron de prisión andaron unos buenos quince minutos, donde Sam casi arrastraba detrás de si a Dream con paso acelerado.

-Oye, a todo esto, ¿de que va la cosa? ¿Ya no aguantaís más a Tommy y voy a acabar la tarea o...?
-Oh por dios cállate.-Quackity rodó los ojos mientras empezaba a agarrar la espada enfundada.

Dream se rió sin gracias y dejó la conversación, siguiendo al dúo a lo que parecía ser el hotel de...¿Jack? ¿Tommy? No estaba muy seguro a quién pertenecía ahora.
Justo en la puerta una gran cantidad de gente se arreglaba por la entrada, no todos los miembros del SMP, aunque por lo menos estaban más de la mitad presentes. Se notaba la hostilidad en el aire, sin duda con caras amargas dirigidas entre ellos, recordando las viejas traiciones y enemistades. Curiosamente fue eso mismo lo que alertó a Dream, la duda de qué era tan importante para que todos se hubieran presentado allí.

Rápidamente todas las miradas se giraron hacia él cuando el grupo se percató de su llegada.
Entre las miradas de desaprobación y recelo pudo distinguir a Sapnap y George.
Sam ni siquiera le dejo hablar antes de apartarle de la multitud hacia donde una brecha de luz flotante de varios metros se imponía sobre el verde hierba del prado.