No me siento segura con Cesar pero me siento acompañada, llevamos tan solo unos días saliendo y ya paso tanto. Siento que paso una vida entera.
Esta mañana me dejo en casa y entiendo que quiere ser amable pero no sé que hacer, estuve toda la tarde pensando y ya se hizo de noche otra vez.
Siento que debo estar sola, debo entender quien soy.
¿Pero como lo saco de mi vida? ¿No puedo simplemente terminarlo y ya?
Tome mi teléfono y llame a Cesar...
Luego de tres tonos contesto
— Hola muñeca ¿Cómo estas?
— Quiero que lo dejemos.- dije en seco y corte la llamada de golpe
Tire mi teléfono a un costado de la cama, busque ropa en mi armario la mas adecuada para ir a un bar "The Joke" o su traduccion "La broma"
Luces por todas partes, musica alta, un tumulto de gente y una barra libre por ser a penas las 12. Mi telefono no habia parado de sonar desde que sali de casa y era Cesar, no iba a arriesgarme a que me busque en el departamento asi que me fui.
Sentada en la barra veo a los dos barmans haciendo un espectáculo con cada trago.
Una chica, con corte pixie un fabuloso vestido violeta oscuro que al principio imagine como negro, unas botas con taco super puntiagudos y una sexy risa totalmente estética al oído se sentó a mi lado.
— Ey tu, niño tonto - dijo y uno de los barmans se acerco y le hizo cara de pocos amigos
— Gwen, estoy trabajando no puedo insultarte de este lado de la barra, pero sabes bien que tenemos la misma edad.- respondió tranquilo un barman con los brazos tonificados al descubierto tatuado, aros en ambas orejas y hermosos ojos café chocolatosos.
— Aja, miedoso - respondió ella sonriendo divertida.
Solo mire la escena, parecían cercanos pero me sentía lo suficientemente incomoda como para interrumpir, me aclare la garganta — Disculpa, ¿tengo que hacer fila para tomar algo?
Él pelinegro se acerco a mi y contesto — Por supuesto que no haría esperar a una hermosa dama como tu.
Me senti incomoda asi que solo evite su mirada y dije —Un té helado, por favor
La chica a mi lado pude ver que estaba sonriendo de oreja a oreja — Olvídalo patán, ella se ve a kilómetros de distancia que esta fuera de tu liga -le grito sobre la música al barman presente.
— ¿Qué dices? No vengo a ligar en el trabajo- respondió haciendo pucheros, parecia un niño me dio mucha ternura
Los rojos labios de la chica se curvaron hacia arriba con desden — Claro... Si tu lo dices- contesto ella.
El barman se fue dejándonos a ambas solas.
— Linda falda escocesa - dijo ella
—Gracias, me gusta tu maquillaje es muy...
— ¿De perra empoderada? - interrumpió ella rio alto — Si, gracias por notarlo.- estiro su mano y las luces de colores intermitentes iluminaron sus muñecas note algunas cicatrices pero para disimular tome su mano suavemente y ella sonrió con complicidad — Soy Gwen, ¿Cómo te llamas?
— Soy Dalilah - dije timida
— Bueno, nena, un gusto conocerte se nota que en tu vida te hace falta una gwen que te saque a bailar.
Me tiro del brazo y comenzo a bailar conmigo al compas de la musica.
— Me gustaría conocerte más, te ves muy tierna - dijo por encima de la musica
— A mi también me gusta...- me vi interrumpida cuando una mano toco mi hombro y señalo la barra
— Tiago, te esta esperando - dijo el chico en mi oído para luego irse.
— Tengo algo de sed -dije señalando a la barra y de inmediato Gwen y yo nos dirigimos allí donde nos esperaba el alto y sexy bartender, aprecie la vista rápido y luego volví a mirarla a ella al sentarnos.
Gwen parecía tener mucha energía, seguía bailando desde la silla, con un coctel en la mano y la otra agitándola en el aire.
Di un sorbo a mi té y la acompañe en el baile sentada. Nuestros cuerpos se movían repitiendo el ritmo de la otra en un momento comenzamos a reír descontroladamente realmente la estoy pasando bien con ella.
Todo es perfecto, me siento liviana como una pluma.
La música se expande por todo mi cuerpo y me veo obligada a levantarme de la silla y a invitar a Gwen que me siga.
El espíritu de la música se apodero de mis caderas y mis pies.
Baile como si nadie me viera y en un momento comencé a cantar con Gwen a centímetros de mi cara... Sentí como si ya la conociera de toda la vida, como si fuera mi hermana.
— Creo que le gustaste a mi amigo... Tiago- dijo ella a en mi oreja
— Tambien me agrada - conteste y segui cantando.
— And I remember all my childhood dreams
I find it hard to get them out of my mind
And I remember all my childhood dreams
I find it hard to get them out of my mind
And I remember all my-Por unos minutos, dejamos de hablar y solo disfrutamos...
La noche era joven y yo estaba mas que satisfecha de mis decisiones ese día. Me acerque a la barra para tomar otro té helado.
— Tu no bebes alcohol? - pregunto el pelinegro curioso
— Mmm... No ¿esta mal?- conteste algo despectiva
— No- hizo una pausa para humedecer sus labios perfectos — Solo me da curiosidad que estuviste divertida toda la noche y sin embriagarte. Te envidio
— Si bueno... A veces hay que dejarse llevar, letritas -respondí y el sonrio
— Letritas? jajaja- pregunto
— Por tus tatuajes.- explique
— Ah, te gustan?
— De hecho, no. Le tengo miedo a las agujas -comente
En ese momento el otro bartender, con lentes y cabello rizo se acerco y suplico — Ey Tiago, no recuerdo como se hace el Negroni... Ayudame - me observo y añadio — Lo siento dulzura, luego te regalo otro te helado, lamento quitarte a tu novio.
— El no es mi...- intente atajarme
— Vamos dejala en paz... - me guiño un ojo y tomo al compañero por el hombro mientras explicaba — El negroni, lleva Gin, campari y...
Se alejaron y luego de un rato apareció Gwen con el labial corrido y el vestido un poco arrugado — Bonita fue un gusto pero tengo que ir a casa, antes de tomar una mala decisión ¿te quedas?
— Creo que voy a terminar el ultimo té y me iré, gracias por la compañia ¿me darias tu numero?
— Por supuesto - ella tomo mi telefono y se agendo
— Gracias- respondi y acto seguido ella me abrazo.
Mas tarde en casa, decidi leer los mensajes de Cesar
"Donde estas?"
"Contesta"
"ahora mismo!"
"Muñeca, me estas preocupando"
"Me estoy empezando a enfadar"
"Contesta las llamadas"
"Porque no estas en tu departamento"
"Tenemos que hablar"
"Es importante"
"Lo digo en serio"
Apague mi telefono y fui a dormir
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No creo en el destino
RomanceDalilah no se encuentra bien pero su camino se cruza con alguien que le presenta el amor, hasta que comienza en un bucle de mentiras y manipulación a cambiar su forma de ser y debe encontrarse de alguna forma.