𝐀 𝐑𝐞𝐤𝐢𝐧𝐝𝐥𝐞𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞 - 𝐒𝐭𝐞𝐝𝐝𝐢𝐞

𝙴𝚕 𝚁𝚎𝚢 𝙲𝚊í𝚍𝚘

La primera reacción de Steve fue de miedo, más que de terror absoluto, pero luego se enfadó. "Henderson". Qué. El. Demonios". Sus palabras bullían entre los dientes, seguía temblando, pero de rabia hacia el chico más joven. "¡No! ¡No te enfades! Mira, sólo sabía que tenías un problema con Eddie por alguna razón, ¡así que quería traerlo aquí para que quizá pudierais hablar! Eso es todo!" Las palabras de Dustin le recordaron a Steve al otro tipo en la habitación y sus ojos se dispararon hacia él. Ahora era más alto, tenía mucho más músculo, pero sus ojos seguían teniendo el mismo brillo de hace años.

Steve se olvidó de todo lo que estaba ocurriendo durante esos pocos segundos en los que miró fijamente a Eddie. Hasta que por fin lo miró a los ojos, y el aire le volvió a entrar en la garganta, y se olvidó de cómo respirar de nuevo. Eddie le dedicó una pequeña sonrisa, una con irritación pintada. ¿Por qué demonios tenía que estar irritado? No era él quien debía estar trabajando ahora, rodeado de paz y tranquilidad. Steve puso los ojos en blanco ante el hombre y volvió a mirar a Dustin, el chico más joven levantó ambas cejas anticipándose a él. "Joder, vale. Te llevaré a tu estúpido club esta noche. Pero lárgate de una vez". Eddie se burló cuando Steve llamó al club tonto y puso los ojos en blanco, dándose la vuelta y saliendo .

Steve lo observó mientras lo hacía, mirándolo todo el camino. La sensación familiar volvió y trató de sacársela de la cabeza, pasándose la mano por el pelo. "¡Te veré esta noche Steve!" Dustin se despidió a gritos mientras corría tras Eddie hacia la puerta. Dios, pensó Steve. Podía sentir un par de ojos mirándole fijamente de nuevo, siendo la misma persona que antes. "¿Quieres hablar de ello ahora?" Lo hizo, realmente, lo hizo. Tenía tanta frustración acumulada, rabia, tristeza. Sabía que a Robin le parecería bien. Sólo que nunca había tenido que explicárselo a nadie. Demonios, apenas podía explicárselo a sí mismo.

"Steve, luchamos juntos contra los rusos secretos, nos drogamos juntos. Sea cual sea la droga que tomaste, sea quien sea que hayas matado. Sabes que puedes contarme. Conoces mi secreto más oscuro, y sabes lo bueno que fue para mí contárselo a alguien por fin. Porque eres mi mejor amiga y confío en ti". Ella sacó la carta de la mejor amiga. Por supuesto que sacó la maldita carta de la mejor amiga.

"Rob no sé por qué estás tan atascado en la idea de que me drogo, pero no es eso". Intentó bromear para salir del paso, pero claro, cuándo ha tenido suerte. "Oh, Dios mío. Así que mataste a alguien". Steve estaba de espaldas a Robin, intentando volver a centrarse en el estúpido expositor de caramelos, "¡Dios, no! ¡Robin! Nosotros..." Tomó aire y murmuró: "solíamos estar juntos".

"Sí, siento no haber entendido eso. ¿Te importaría, no sé. HABLAR A UN VOLUMEN NORMAL". Joder... "¡ESTAMOS ENGANCHANDO A ROBIN!" Los ojos de Steve se abrieron de par en par y se tapó la boca con la mano, agradeciendo eternamente que nadie quisiera alquilar una película en ese momento. Se giró lentamente, encontrándose con los ojos abiertos de su mejor amigo. "Tú... tú. Tú. ¿Tú? Tú-. Oh, Dios mío, tú... No puedo creer... ¿Tú eres? ¿Qué?" Sus ojos miraban a todas partes tratando de entender lo que Steve acababa de decirle.

"Mira, sólo". Inspiró profundamente y volvió a pasarse la mano por el pelo, intentando no vomitar. "Estuvimos juntos en algunas clases, bien. Quiero decir, ¡se suponía que nos íbamos a graduar juntos! Yo estaba confundida en ese momento y escuché el rumor de que él era, ya sabes, gay. Obviamente es como, atractivo, supongo. Un día me inventé una excusa y conseguí que se reuniera conmigo en el bosque para poder comprarle algo de hierba y una cosa llevó a la otra, y ya sabes, sí".

Los ojos de Robin parecieron abrirse más desde la última vez que los miró. Steve se frotó las manos por la cara y gimió. "Robin, ¿podrías decir algo antes de que explote?". Sus ojos se convirtieron lentamente en rendijas. ¿Rayas confusas, pero también ligeramente irritadas? "Una cosa no lleva a otra, Steve. Si lo hicieran, ahora tendría una novia, pero adivina qué, ¡no la tengo!" Lo siento Steve pensó, ¿Cómo se le ha dado la vuelta a esto? "¡No lo sé Rob! Yo sólo, no sé, coqueteé, supongo. Terminamos fumando un poco y Dios sabe que soy atractiva así que las cosas simplemente sucedieron!"

Ella levantó las cejas hacia él, "humilde como siempre Steve". Ella le dedicó una sonrisa apretada, todavía encontrando su camino a través de todo. "Así que me estás diciendo que tú, Steve Harrington. ¿Te has liado con Eddie el friki Munson?" Una ligera sonrisa adornó sus labios al pensar en ello. "Desde hace un año, sí". Su cara se disparó de nuevo con los ojos muy abiertos, 

"¿un año? Un año Steve!" Pensó en ese año, fue el más feliz que prácticamente había tenido. "Sí, mi segundo año".

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<3 ¡Hola, es el autor! Estoy tan hiperfijada en estos dos chicos ahora mismo. Y la relación que probablemente no se dé, pero que si Dios quiere, se dará. 

Hola! La traductora habla! Si ven errores no tenga poblema en decirmelo. Besitos♡