Empezar a sanar

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Me fui de este país hace años con los sueños destruidos...

Hoy me voy con el corazón destrozado en mil partes...

Estoy solo en el aeropuerto, no quise que nadie viniese a despedirme. La gorra, los lentes y el barbijo ocultan mi identidad. En este momento no deseo estar ni ver a ninguna persona. Entrego mi pasaporte y la muchacha del otro lado enloquece. Pide una foto y sé que mi presencia aquí no tardará en viralizarse.

Despacho mi maleta, tomó asiento en la sala de espera mientras abro un viejo libro. No pude cumplir mi palabra y dejar el celular en el apartamento porque esa conducta solo haría que algunas personas se preocuparan. Además había prometido a Bible y Biu que les escribiría cada tanto para decirle como iban marchando las cosas. 

Anoche había revisado el teléfono y visto algunas llamadas perdidas y mensajes de P'Mile. Su insistencia por saber quién me traería al aeropuerto hizo que apagara el aparato y lo guardara en la maleta.

La voz en el megáfono anuncia el vuelo y el ascenso de pasajeros. Me levanto despacio y por primera vez miro la puerta de ingreso deseando que él ingrese corriendo, que llegue pidiéndome que desista de mi viaje, que me quede con él. Explicando que no puede vivir sin mí. Y yo lo pensaría mientras él se arrodilla y me declara su amor. La gente alrededor aplaudiría enloquecida.

Si, soy un romántico de la vieja escuela y amante de las series y libros de amor. También soy un iluso que espera más de la vida de lo que ella le da. Esas cosas solo pasan en las películas. En la vida real el héroe es un villano y no sabe hasta qué punto hizo pedazos un corazón. La princesa es un pobre infeliz al cual le llegó su alarma de medianoche. El carruaje se transformó en calabaza y el hechizó terminó. Miro la puerta una vez más mientras una sonrisa triste asoma.

Mi asiento da hacia la ventanilla, me coloco los auriculares para evitar que me hablen sin embargo la voz de la joven azafata interrumpe mi descanso. Me cuenta que es fanática de la serie así como de la banda, pregunta si puede tener un autógrafo y tomarme una foto. La llegada de otra de más edad y la mirada fulminante que le da me hace comprender que es la superiora. Se disculpan y alejan.

El ruido de la turbinas, el movimiento del avión me hacen pensar que esto es un deja vu. Hace cinco años dejé este país buscando redención en un nuevo lugar. Pude sanar, eso me da la confianza de que podré hacerlo de nuevo. Aquí sufrí mucho hace años intentando ganarme mi espacio y aunque lo intenté una y otra vez las miradas despectivas, los insultos velados no cesaron. Filmar pasó de ser mi gran sueño a una terrible pesadilla. El día a día fue cavando hondo dentro de mí hasta que bajé los brazos. Me sentía un paria en mi propio país.

Así y todo no hay forma de comparar aquella despedida con esta. El dolor no es para nada igual. Saqué un pequeño dispositivo para poner música, escogí el álbum  Medicine at Midnight de Foo Fighters. Sí, estoy apegado a viejas costumbres.

Respiro hondo y me relajo. Será un largo viaje.  La prisa por conseguir pasaje me hizo adquirir uno con escala. Tendríamos que descender en el Doha Hamad International. Lo único que esperaba es que ninguno de los tripulantes de allí me reconociera. Qatar no era un país amante de los BL pero ya me preocuparía por eso después.  Suspiro otra vez mientras cierro los ojos. Y otra vez los recuerdos se hacen presentes

Mile quería hacerlo lentamente pero yo tenía otra idea

- Mile, más, por favor, necesito más- sollozaba presionándolo contra mi

- Po... - dijo tomándome fuertemente de la cadera , empujándose cada vez más rápido mientras  con una mano sostenía su hermoso trasero y con la otra sostenía su cabello sin dejar de mirarlo a los ojos

Destrozado en mil partes - MILE APO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora