El Final- Parte II

1K 110 13
                                    

Abrí los ojos muy lentamente, la luz que ingresaba desde la ventana a la habitación molestaba mis pupilas. Sentí el cuerpo aletargado, moví despacio el cuello de un lado hacia el otro, observando un techo blanco desconocido para mí. Intento incorporarme pero rayos de dolor se dispersan por distintas partes de mi cuerpo como si fueran cuchillas filosas.

De a poco, pequeños recuerdos de lo sucedido penetran en mi mente: el alcohol, la noche con Mile, la mañana después, la bocina antes del impacto. Comprendo entonces que sufrí un accidente y ahora con miedo necesito saber la gravedad de las lesiones.

Procuro suavemente mover mis piernas y brazos. Los miembros inferiores respondieron sin problema y suelto el aire contenido con alegría, el brazo derecho dolía, observo que es por la cánula intravenosa y el suero. La mano izquierda no puedo moverla. La siento pesada y caliente, se encuentra aprisionada por una persona profundamente dormida sobre ella.

Intento enderezarme nuevamente pero una puntada de agudo dolor en la cabeza me hace gritar despertando a mi bella durmiente. Lo veo apretar con fuerza mis dedos antes de girar su rostro. Un fuerte jadeo me toma desprevenido al observarlo detenidamente.

Es Mile pero a la vez, es una persona diferente. Sus ojos hundidos y las bolsas negras debajo de ellos, la barba desalineada, el pelo desprolijo y la ropa arrugada me muestran a un Mile demacrado nunca antes visto. Lo que más llama mi atención es la pérdida de peso visible que ha tenido desde la última vez que estuvimos juntos. ¿Cuánto tiempo estuve dormido?¿Qué demonios ocurrió?

Me devuelve la mirada con ojos llenos de lágrimas mientras intenta hablar acariciando mi brazo

- Po...- susurró - estas despierto

- P'Mee ...- contesté sin entender la desesperación en sus palabras.

La verdad es que no recuerdo que pasó luego del impacto, mi último instante de lucidez fue cuando escuché la bocina del auto. Pero algo extraño ocurrió después. Quizás la necesidad de Mile en mi vida me juegue una mala pasada, me haga alucinar o tal vez simplemente me estoy volviendo loco pero tengo en mi mente flashes de él hablándome durante horas y horas, pidiendo perdón, diciéndome que me amaba una y otra vez. Contándome que ¿me había comprado un negocio? ¿El pub de John? Definitivamente mi cordura voló junto con mi cuerpo en el impacto. Intento tocarlo pero se levanta.

- Deja que llame al médico para que te revise - dijo parándose rápidamente no sin antes tocar con la punta de sus dedos mi mejilla- si supieras todo...- cortó en seco cerrando con fuerza los ojos, apretando el puño para luego darme una triste sonrisa.

Instantes después ingresan a la habitación tres personas uniformadas que controlan los monitores, mi temperatura, revisan partes de cuerpo, mis pupilas. Cuando me canso de tanto manoseo y estoy por hablar, uno de ellos se presenta como el Dr Ricks y me informa sobre el accidente, las lesiones físicas, los dos paros cardiacos sufridos así como el coma del que acababa de despertar luego de diez días.

En el fondo de la habitación veo a Mile recostado sobre la pared con los ojos cerrados escuchando en silencio. Entiendo ahora la gravedad de lo sucedido, así como el sufrimiento por el que atravesó y desde el fondo de mi alma siento mucho pesar, por haberle provocado ese dolor más allá de las circunstancias.

El médico explica los pasos a seguir, permanecería unos días más internado en una sala común y luego, tendría que realizarme controles durante un tiempo para evaluar las posibles secuelas cerebrales. Termina diciendo que todas estas cuestiones ya fueron explicadas a mi pareja provocando un jadeo ahogado de mi parte y que Mile abriera los ojos de golpe mirándome antes de bajar la cabeza sonrojado.

Se retiran y él vuelve a acercarse. Sus movimientos son dubitativos como si no supiera que hacer. Estiro mi mano pidiéndole en silencio que la tome y se acerque otra vez. Iba a hablar cuando lo veo derrumbarse sobre una silla con la mirada perdida

Destrozado en mil partes - MILE APO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora