𝐋𝐚 𝐁𝐚𝐢𝐥𝐚𝐫𝐢𝐧𝐚 𝐘 𝐋𝐚 𝐏𝐢𝐚𝐧𝐢𝐬𝐭𝐚 || G!P

Final

Luz golpeteaba el piso del auto de manera impaciente y sin parar, sus rodillas se movían de arriba abajo y sus dedos jugueteaban nerviosamente con los hilos sueltos de sus pantalones de pijama mientras Boscha a su lado manejaba lo más rápido que podía. 

— Luz... ¿Podrías por favor explicarme qué demonios está pasando? — Preguntó Boscha, su voz tratando de sonar normal pero no pudo evitar que se quebrara un poco al final por el miedo que sentí ante el estado en el que se busca su mejor amiga. 

Ella había estado durmiendo pacíficamente en el sillón de la sala con el televisor todavía encendido a su lado emitiendo una luz ligera y la película que estaba viendo apenas iba por la mitad cuando sintió como era sacudida fuertemente y Luz le gritaba que por favor se despertara. 

Al escuchar el tono de voz desesperado de su amiga se levantó rápidamente y abrió los ojos tratando de enfocar su vista borrosa en el rostro de Luz que estaba pálido y con sus ojos cristalizados y rojos. 

Ella trató de preguntarle a la castaña qué ocurría pero ella solo le había dicho que necesitaba que la llevara urgentemente al hospital, al principio Boscha tuvo miedo ante la idea de que Luz se había lastimado de alguna manera, pero la menor se veía bien, sin ninguna herida visible así que volvió a preguntarle qué estaba pasando pero una vez más no recibió una respuesta directa por parte de Luz, simplemente el nombre del hospital que quedaba a unos veinte minutos de su departamento y le pidió que la llevara ahí lo más rápido posible.

Así que ahora ambas estaban en el auto de Luz, con Boscha manejando y la menor en un estado casi catatónica y nerviosa que estaba preocupando cada vez más a Boscha, cuando por fin aparcó a las afueras del hospital Luz se apresuró a abrir la puerta del auto pero la mano de Boscha en su brazo se lo impidió. La castaña se volteó y miró a su mejor amiga con el ceño fruncido, cuestionando silenciosamente el porqué de su interrupción. 

— Luz, sabes que eres mi mejor amiga, y por eso mismo no dejaré que te bajes de este auto hasta que me digas qué es lo que está pasando — Luz trató de zafarse de su agarre pero Boscha no la soltó haciendo que la castaña soltara un bufido exasperado — Por favor Luz, estás demasiado nerviosa y en shock ahora mismo, no puedes entrar así como estás, así que tienes que respirar, calmarte y decirme qué sucede. 

Luz respiró profundamente un par de veces y suspiró antes de asentir y apoyar su cabeza contra el asiento observando fijamente a Boscha

— Cerca de media noche recibí una llamada, era la mejor amiga de Amity, sonaba agitada pero después de unos minutos logró controlar lo suficiente para decirme que a mitad de la cena de celebración que estaban teniendo Amity se desmayó mientras caminaba hacia el baño, trataron de hacer de todo para que se despertara pero no lo hizo y la trajeron al hospital lo más rápido que pudieron, por eso quise que me trajeras aquí ¿ok? ¿Contenta? — Preguntó de manera brusca soltándose del agarre de Boscha, ella sabía que su mejor amiga no tenía la culpa, que quería ayudarla, pero lo único que quería en este momento era ver a Amity y Boscha solo la estaba retrasando.

Boscha parpadeó sorprendida un par de veces y soltó el brazo de Luz, abrió y cerró la boca un par de veces sin saber qué decir, solo podía imaginar lo triste que se sentía su mejor amiga y quería decirle algo, cualquier cosa que la ayudara, pero sabía que lo que menos necesitaba Luz en estos momentos eran palabras, la castaña  solo quería ver a Amity y ella no la retendría más tiempo a su lado. 

Boscha observó por unos momentos más a Luz y suspiró pesadamente antes de soltar su brazo viendo como la castaña salía rápidamente del auto sin mirar atrás y sin molestarse en cerrar la puerta. 

Boscha apagó el auto y se aseguró de cerrar la puerta antes de bajarse y caminar hasta el hospital siguiendo de cerca a su mejor amiga, ella no pensaba dejarla sola mientras pasaba por todo esto.