A secret place (Megadeth, Dave Mustaine) PARTE 1 y 2

33: Just Another Day

Han pasado dos meses desde que Will se sobrepasó conmigo.
Le dejé más que claro mis intenciones y él se disculpó conmigo, obviamente lo perdoné, no podemos vivir estando distantes.

Con Dave, Salimos a escondidas cada noche y vamos a algun bar a beber hasta que terminamos teniendo sexo en los lugares más inimaginables.
Claro que me gusta satisfacerlo, por que así tambien lo hago yo. No tengo problema en tener relaciones con él cada vez que nuestros cuerpos nos lo pidan, porque siempre terminamos dandonos caricias y diciendonos cosas cursis.

Hoy no era la excepción, Era media noche.
Aproximadamente las 11 de la noche, Will de seguro estaba durmiendo. Ese chico duerme siempre.
Me coloqué un vestido morado intenso con unas medias oscuras. No es por ser egocéntrica pero me veía bastante decente para la ocación.

- Pss.- sentí un susurro por fuera de la ventana. - Preciosa.- al escuchar la voz de mi pelirrojo me sonroje y abrí la ventana para saltar.

- Ten cuidado ¿si?- me advirtió. Estaba tan contenta de salir con él, que resbalé por el marco de la ventana cayendo igual que un saco de papas al suelo.

Al ver que no reaccionaba, Dave se apresuró a ver si estaba bien. Pero no hubo respuesta. - ¡Jassy! ¡Jassy! Dios.- se tomó la cabeza. - Todo es mi culpa.-

Comencé a reir. - Dave. Tranquilo, es una broma.- me levanté. Me miró molesto. - Ven aquí.- le agarré su polera atrayéndolo hacia mi para besarlo. Siempre se le pasaba el enojo con mis besos.

- Ja.- rió de un lado. - Siempre consigues lo que quieres ¿No es así?- Me jaló de la cintura apegándome a él. Sentí como su miembro se asomaba por su pantalón y comencé a ponerme nerviosa.

- Te ves....- hizo una pausa para mirarme de piez a cabeza mi vestido. - Deliciosa... Eres más adictiva que las drogas.-

Sonreí. El chico intentó besarme pero lo esquivé. - Aún no... Ya tendremos tiempo para eso.- caminé hacia su auto, él me seguía. - ¿Me dirás a donde iremos hoy?-

- Tengo el lugar perfecto a donde iremos esta noche... Mi amor.- sonrió y nos subimos al vehiculo.

(....)

Llegamos a una plaza. No pude distinguirla muy bien pero era bastante oscuro.
- Dave... ¿Estás seguro que este es un lugar... Seguro?- pregunté bajandome del auto sin soltar su mano.

Al observar mi reacción, Me abrazó. - Totalmente.- me besó. - Tranquila amor. Yo soloía venir aquí con mis amigos a tomar y beber un rato. Conozco el lugar cono la palma de mi mano.-

Le sonreí timida y nos fuimos caminando hacia unas bancas cerca del bosque.
Un grupo de chicos cruzó, Habían dos rubios, un pelirrojo y dos pelinegros.
Parecían unos rockeros al igul que Dave.
Estos chicos se sentaron a fumar y a reír al otro lado del parque, por lo que supuse que era un imán de alcoholicos.

Cuando estabamos sentados en la banca, Dave pasó su mano por debajo de mi vestido para tocarme mis muslos.
- Te ves hermosa con medias..- dijo en un tono perverso en mi oído causándome una extraña sensación en mi zona púbica.

- Dave... No lo haremos en medio de un parque.- reí quitandole la mano.

- Ugh.- rodó los ojos. - Al menos ven aquí.- me sentó encima de su regazo abrazandome.

Le acaricié sus mejillas mientras lo miraba fijamente. - Me encantan tus ojos.- sonrió.

- A mi me encantas tu Dave.- comencé a besarle las mejillas sin parar. - Prometeme que núnca me vas a dejar.-

Alzó una ceja. - Ni si quiera lo dudes.-

Pasaron las horas, unos cuantos besos mojados también eran parte del ambiente hasta que alguien aparece tras nosotros.
- ¡Dave Mustaine!- Una voz femenina gritaba.

Ambos nos volteamos a ver.
Era una chica de estatura promedio, cabellos castaño escarmenado y unos ojos claros.
Traía una falda de terciopelo roja.

Me observó de pies a cabeza. - ¿Por ésta me reemplazaste?- preguntó mirandome con disgusto.

- Perdon.- interrumpí. - ¿Tu quien mierda eres?- me puse a la defensiva en ese mismo instante.

- El amor de su vida querida.- Rió.

El pelirrojo se levantó de la banca y la tomó de los hombrls para apartarla. - Diana por favor, No es el momento ni el lugar..- Exclamó.

- ¿Y por qué no?- se zafó. - Yo se que tu aún me amas Dave, Por algo te metiste con esta..- hizo una pausa. - Zorra para olvidarte de mi. Acaso no recuerdas cuando me decías que me amabas... Que yo era la única mujer en el mundo y que dehecho perdí mi virginidad contigo de una manera.- se mordió el labio. - Exitante.-

- No te refieras a mi como una Zorra.- la golpeé en su mejilla. Dave se quedó sorprendido por mi reacción y me jaló del brazo con una sonrisa.

- Wow, No sabía que hacias eso... No después de cuando nos conocimos.- rió.

Lo miré incomoda. La situación y lo era, no era ni el momento ni el lugar como para bromas o anécdotas. - No te vuelvas a acercar a mi novio, ¡¿Me escuchaste Perra?!-

No respondió, se sentó en el suelo a recuperarse del golpe mientras nosotros nos adeantabamos para irnos de vuelta al auto.
Ésta noche no podía ser más incomoda.