De Sirvienta A Bestia (Alcina Dimitrescu X Chica)

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-¿A donde quieres llevártela?- mi ama se cruza de brazos y lo mira desafiante
-A mí fábrica, quiero ver lo que hace esta jovencita frente a un grupo de mis criaturas- al hacer mención de los Lycans me pongo muy nerviosa y tiendo a sujetar la tela que llego a alcanzar del vestido de Alcina
-Está bien, pero como te pases de la raya juro por lo que más quieras que te atravieso con mis garras- vuelve a carcajear y tras mi ama pedir que nos traigan unas capas salimos tras yo insistirle en que no hace falta que lleve unas botas, salimos del castillo y fuera estaban esperando dos caballos, uno para el otro Lord y uno del tamaño para mi señora, nos acercamos a ellos y mi señora tras subir me sube frente a ella y vamos hacia la fábrica que se encuentra casi a las afueras de la aldea donde vivimos, al llegar veo a un grupo grande de Lycans y de otras criaturas, me ayuda a bajar del corcel y nos quedamos paradas frente al gran grupo
-Veamos de lo que eres capaz- sin avisar ni nada los monstruos se aproximan a mi y miro a mi ama en busca de ayuda, parece que el otro monarca ha visto algo que ordena a sus criaturas a atacarle a ella y mosqueada me acerco y siento mi cuerpo cambiar de aspecto al de una licántropa de pelaje gris y les gruño bien alto a modo de amenaza justo antes de algunos lanzarse hacia mí y yo me defiendo con garras y dientes hasta que llego al punto de cansarme y suelto un fuerte y alto aullido que los paraliza a todos
-Al próximo que se atreva a acercarse tendrá un destino peor que la muerte- les amenazo con voz muy grave, veo que todos se inclinan ante mí
-Parece que han encontrado a su nueva líder- comienza a acercarse Heisenberg y no puedo evitar gruñirle y sorprendido se detiene- yo no soy el enemigo- se acerca con cautela y una vez lo olfateo estoy tranquila- veo que ahora tenemos a otra de los nuestros, la pena es que es tu mascota, tienes suerte pedazo de zorra- al escuchar eso me abalanzo sobre él
-Jamás la vuelvas a llamar así frente a mí, próxima vez y te despedazo- le grito enfurecida antes de lanzarlo lejos y con fuerza- ¿Estás bien?-
-Sí, no te preocupes- me mira aún con sorpresa y me doy cuenta de lo que ha pasado al también escuchar un quejido del hombre
-Lo siento mucho, fue sin querer- me alejo asustada y entre más intentan acercarse más retrocedo
-No pasa nada, tranquila- dicen con la intención de calmarme
-No, no quiero herirles, lo siento- me echo a correr sobre mis patas en dirección al bosque bajo los llamados de los dos monarcas mientras que de mis ojos salen lágrimas y cuando por fin me detengo me encuentro en medio del bosque y desorientada, trato de localizar donde estoy pero no sirve de nada

De repente llega a mi mente imágenes de yo estar corriendo de noche por aquí y el suelo cubierto de nieve, me duele todo el cuerpo y estoy huyendo de algo o de alguien que me llama y tengo mucho miedo, mi cuerpo está muy mal herido y sigo corriendo hasta que llego al castillo y vuelvo al tiempo actual. Está anocheciendo y a mis oídos llegan muchos sonidos que me aterran no solo de criaturas, también de voces.

-¡Ágata!- reconozco esa voz de entre todo lo que me rodea- ¡¿Dónde estás?!-
-¡Alcina!- digo alto antes de echarme a correr en su dirección sin importar el daño que me estoy haciendo o las veces que me caigo al suelo por no ver por dónde voy- Alcina-digo cuando por fin la veo y ella a mí y la veo agacharse justo a tiempo de yo saltar a sus brazos en un mar de lágrimas- lo siento, lo siento mucho, he sido mala, perdóname, lo siento mucho, no lo volveré a hacer más- sollozo en sus brazos
-Tranquila, no pasa nada, ahora estás bien, estás a salvo, ha sido un accidente, vamos, volvamos al castillo, está haciendo frío- sin decir nada me carga en sus brazos justo cuando vuelvo a mi forma humana y me refugia entre su cuerpo y la capa que la protege del frío, apoyo mi cabeza en su pecho y soy capaz de escuchar los leves y pausados latidos de su corazón, al poco tiempo llegamos por fin al castillo y entramos a nuestros aposentos, me deja una muda de ropa puesto que sin querer destroce la que tenía y me visto sin alzar la cabeza y recuerdo lo que pasó antes de escucharle
-Alcina,cuando estaba en el bosque perdida recordé algo de antes de aparecer aquí- eso ha llamado su atención y se sienta conmigo en su regazo en la cama
-Dime lo que has recordado -
-Recuerdo de estar corriendo deprisa en el bosque, rodeada de nieve, me dolía todo el cuerpo y creo que tenía muchas heridas, a pesar de todo el dolor, seguía corriendo, como huyendo de algo o de alguien que me llamaba y tenía mucho miedo, conseguí llegar a las puertas del castillo y ya después no recuerdo más- le cuento tal cual recuerdo
-Es cierto de qué cuando llegaste te encontrabas en muy mal estado y muy lastimada, estuviste inconsciente por casi una semana antes de despertar completamente desorientada- concuerda con los hechos que recuerdo- ¿Y no te suena de nada esas voces que te llamaban?- trato de hacer memoria pero no lo consigo y niego con la cabeza
-Me resulta demasiado familiar pero no sé de qué- agacho la cabeza- mi señora, me he portado mal con Lord Heisenberg y os he desobedecido cuando me llamabais, merezco ser castigada, no estuvo bien lo que hice-
-No va a ser necesario, es normal que esto pase puesto que no te controlas- vuelvo a negar con la cabeza antes de ponerme en el suelo y ponerme de rodillas
-Mi ama, por eso mismo debo ser castigada, así aprenderé, he sido mala y merezco ser castigada- sigo insistiendo, ella suspira pesadamente
-Ya pensaré en algo, pero ahora debes de descansar, han sido muchas emociones en poco tiempo- asiento
-Como mi señora desee.....-