fly me to the moon •kth+pjm•

extra

fly me to the moon, let me play among the stars, let me see what spring is like on Jupiter and Mars...

Taehyung escuchó aquella canción un día caluroso de abril, tan caluroso que incluso respirar era increíblemente agotador.
Terminaba la práctica de futbol con el equipo, estaba cansado, empapado en sudor y frustrado porque no había dado precisamente todo de sí mismo, incluso el entrenador le había llamado la atención en incontables ocasiones.

Sabía que había sido un asco en la cancha, lo aceptaba, no estaba en la mejor condición.
Estaba tan frustrado consigo mismo que ni siquiera había esperado a tomar una ducha con todos los demás, pues no le apetecía escuchar sus charlas más que superficiales, aquellas en las que solo se la pasaban alegando qué chica tenía mejor cuerpo, qué chica sería buena para hacer cosas que él claramente no quería escuchar. Eran desagradables.

Así que importándole poco aún llevar puesto el uniforme y claramente no oler de la mejor manera, salió directo hacia los casilleros, tomando su ropa y mochila con tanta fuerza y frustración que incluso lastimó uno de sus dedos.
El dolor fue inmediato, así como la sangre que escurrió debido al golpe, estaba seguro de que quedaría una lesión que el entrenador le reclamaría apenas lo viese y tuviera la oportunidad.

Soltó un bufido, más parecido a un lloriqueo para después colgarse la mochila y caminar hacia los bebederos más cercanos, deseando que no hubiese nadie más cerca para, de ser posible, tirarse un poco de agua en el rostro y deshacerse de aquel molesto sudor que lo tenía empapado, y de paso limpiar minuiciosamente la herida que su frustración y torpeza habían provocado.

Eran cerca de las cinco de la tarde, así que era casi seguro que no habría nadie, si acaso algún conserje chismoso o alguna coordinadora con ganas de joderlo, esperaba que no fuera el caso.
Caminó casi arrastrando los pies, se sentía cansado, totalmente cansado, no solo físicamente, sino mentalmente también.
Soltó un suspiro una vez que aquellos bebederos estuvieron frente a él, importándole poco el detenerse a verificar que no hubiese nadie cerca.
Abrió la llave de inmediato, tomando del agua como si hubiese pasado días sin tener la boca húmeda, asimismo mojó su rostro, salpicando el mismo con tanta fuerza que incluso dolió un poco y rio ante lo estúpido que fue.
La relajación llegó de inmediato, sus hombros se destensaron en el momento en que dejó la llave abierta, su cabeza debajo del chorro.

Era genial, sin el entrenador gritando, sin los asquerosos de sus compañeros hablando de tonterías, sin todas esas chicas que siempre lo acosaban en cada oportunidad, era simplemente el tipo de vida estudiantil que quería tener.
Hacer lo que quería, disfrutar de eso y andar sin preocupaciones.

—In other words, hold my hand, in other words, kiss me baby~

Taehyung se sobresaltó en el momento en el que escuchó aquellas palabras.
Temiendo que fuese alguna profesora, la delicada y dulce voz no parecía ser de alguien más, así que con un poco de pena y temor, cerró la llave y levantó la cabeza cautelosamente, observando en todas las direcciones, esperando que solo fuese alguna chica de otro club y no una profesora como había pensado.

Mas su sorpresa fue enorme al no encontrar a nadie más que un chico.

Sentado en una de las bancas que quedaban directamente bajo el arbol más grande que había en la facultad.
La sombra ahí era estupenda, y más a esa hora, era el tiempo perfecto para relajarse en ese lugar.

Tragó saliva y estuvo a punto de salir de ahí sin ser visto, mas nuevamente aquella voz le taladró los oídos, giró desesperadamente en busca del dueño, sorprendiendose aún más cuando notó que era la voz de aquel chico la que resonaba por todo el patio.
Una voz preciosa, dulce, afinada y cálida.