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-¿Tetsuya/Kuroko?-dijeron ambos sorprendidos.

El nombrado asomó su cabeza por un costado del gran cuerpo de Murasakibara quien en ese momento comía papas.

-¿Mmm? Akashi-kun,Midorima-kun ¿Qué hacen por aquí?-dijo el peliceleste.

-Nada en especial,sólo Caminábamos hacia un restaurante ¿cierto,Shintarō?

El de lentes asintió.

-¿Quieren venir con nosotros?-preguntó Midorima- sólo si quieren.

A Murasakibara se le iluminaron los ojos en sólo pensar que podría comer todo lo que quisiera y lo más hermoso era que él no pagaría absolutamente nada.

-Claro que si Aka-chin,Mido-chin.-aceptó por los dos.

-Entonces vamos.-sentenció el heterocromatico.

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El camino fue un tanto raro,Akashi intentaba abrazar a Kuroko y de vez en cuando se le acercaba demasiado a él dejándolo incómodo o estático por la intromisión hacia su espacio personal.

-Bien llegamos.-habló el pelirrojo granate.

-Muy buenas tardes caballeros.-saludó el camarero.

-Buenas tardes.-saludaron todos.

-¿Qué desean pedir primero?-preguntó a los tres jóvenes.

-Yo quiero una ensalada con arroz y un soba por favor-pidió Kuroko.

-¡Ah!¡Mil disculpas caballero no lo note,de verdad perdón!-se disculpó el camarero dando una reverencia.

-No importa,tranquilo.-le calmó Kuroko-¿Si pudiste tomar mi pedido? O te lo vuelvo a repetir.

-No,si tomé tú pedido,tranquilo.Y bien,que van a ordenar.-les dijo a los otros.

-Yo quiero katsudon- dijo Shintarō.

-Nee~ yo quiero ramen y varios postres~-comentó Murasakibara.

-Y yo quiero miso con arroz,carne y ensalada.-ordenó el heterocromatico.

-Bien.

Y así fue como el chico se retiró dejándolos sólos.Atsushi estaba jugando un poco con Kuroko y algunas ocasiones acariciando su cabello celeste mientras que Akashi y Midorima trataban de no darle tanta importancia a esos dos.

-Ya para Murasakibara-kun me están empezando a doler de nuevo.-decía Kuroko con una mueca de dolor.

El peli-lila paró y con sus brazos ocultó al menor implantándole un beso en la cabeza.

-Lo siento Kuro-chin.

El pequeño se removió dando a entender al gigante que quería separarse.

-Bien caballeros aquí está la ensalada con arroz y el soba.También está el katsudon,los otros dos se demoran un poco-informó con vergüenza.

-Gracias-dijeron al unísono el peliceleste y el peliverde.

-Tranquilo podemos esperar-habló Akashi.

El camarero se retiró.

Mientras que Kuroko comía Atsushi lo veía sin quitarle la vista de encima poniendo al menor incómodo y culpable.
Y soltando un suspiro se acercó hasta el gigante posicionando el plato con soba en su mano y con la otra le paladeaba con los palillos,Atsushi contento recibía cada bocado que Kuroko le daba poniéndolo muy feliz.

🐮🌽La vaquita de la Kiseki No Sedai🌽🐮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora