traducciones genshin impact x M!reader (pedidos abiertos!)

Dottore x male Reader

Si dijera que no sabía cómo una sesión de investigación con su rival académico, Dottore, lo convirtió en él inclinado sobre la mesa de laboratorio lleno de sus dedos, entonces estaría mintiendo. Y mentiría aún más si dijera que ninguno de los dos no lo disfrutó.

Había comenzado con las bromas regulares: tú diciéndole que estaba haciendo mal su trabajo, él diciéndole que te fueras a la mierda, tú siendo condescendiente, lo habitual. Entonces, siguiendo esa ruta, ustedes dos se miraron a la cara y comenzaron a hacer comentarios groseros que los convirtieron en una intensa sesión de besos. Unas pocas manos errantes más tarde se convirtieron en Dottore extendido contra la mesa, quejándose de que tus dedos eran tan patéticos como tus métodos de investigación.

Curvaste los dedos, rozando su próstata. Dejó escapar un gemido, con la frente apoyada contra la mesa.

"¿Estás seguro de eso, mi estúpido doctor?" bromeaste, golpeando su próstata una y otra vez.

"Estoy... estoy bastante-joder-seguro de eso", se interrumpió con otro gemido, esta vez porque añadiste otro dedo en su trasero. "No puedes- oh mierda, mierda."

Te encantaba ver lo patético que era. Cada sesión de investigación terminó de la misma manera: Dottore rogando por tu polla y tú amando la atención. Claro, lo odiabas, pero no podías quejarte de mojarte la polla.

"Si tan solo fueras tan bueno en la investigación como lo eres siendo una puta sucia". Sacaste los dedos, ignorando los gemidos de Dottore. Fue a darse la vuelta, con la boca cargada de insultos. Pero lo empujaste hacia adelante.

Con los pantalones bajados lo suficiente como para poder sacar tu polla (a diferencia de Dottore que estaba prácticamente desnudo), lo guiaste hasta su entrada. Empujaste dentro de él con un gemido y tocaste fondo de inmediato. Él gimió de dolor pero a ti no te importó. Era su culpa por ser un imbécil, de todos modos.

Dándole un minuto, estabilizaste tus manos en sus caderas y saliste lentamente antes de volver a empujar rápidamente. Repetiste la acción, golpeándolo sin piedad.

"Esto no es... ni siquiera es tan bueno", se rio entre dientes. Las manos de Dottore agarraban la superficie de la mesa como si su vida dependiera de ello, la polla rebotaba y se retorcía junto con tus embestidas.

"Cierra la puta boca". Lo agarraste del cabello y tiraste de su cabeza hacia atrás. Una sonrisa de felicidad estaba en su rostro como si se estuviera burlando de ti. La baba se acumulaba en el borde de su boca. Sus mejillas estaban enrojecidas, los ojos vidriosos.

Le mordiste el cuello. Tus dientes perforaron su piel, formándose sangre mientras te alejabas. Pre-semen se derramó de su palpitante polla. Levantaste sus caderas más alto para poder empujar más profundamente en él, para poder alcanzar su próstata nuevamente. Cada vez que tu punta se frotaba contra ella, Dottore gemía más y más fuerte y eso solo te impulsaba a ir más rápido y más duro "¿Podrías, joder, dejar de disfrutar esto?" Escupiste, volviendo a su cuello para atacarlo con marcas que sabes que no podrá ocultar. La idea de que él tuviera que explicar que su rival lo había follado sin piedad, la vergüenza en su rostro, te acercaba a tu clímax.

"Ja, solo cuando... solo- joder, ¡justo ahí, justo ahí!" Dottore gritó más fuerte que antes, las caderas tartamudearon mientras el semen salía disparado de su polla. Cayó contra la mesa, las manos temblando mientras lo follabas hasta el orgasmo. Un balbuceo sin sentido salió de sus labios y la baba cubrió la mesa.

Sus paredes se tensaron, agregando más placer a tu pene mientras perseguías tu propio orgasmo. De tus labios salían obscenidades: desde llamarlo puta hasta decir que nadie podrá follárselo tan bien como tú. Con unos últimos empujones, te vaciaste dentro de él, mordiendo su cuello nuevamente para evitar aumentar su ego ya inflado.

Los dos permanecieron en esa posición por un tiempo, ambos bajando de sus alturas. Descansaste tu cabeza contra la de Dottore y él se apoyó contra la tuya. Si un extraño pasara y los viera a los dos, habría asumido que estaban en una relación por la ternura con la que te apartaste de él y cómo lo ayudaste a sentarse (obviamente ignorando el hecho de que habías follado en un laboratorio).Metiéndote de nuevo en tus pantalones, ayudaste a Dottore a vestirse mientras todavía estaba temblando, aunque solo un poco. Cuando terminaste de abotonar su camisa, lo miraste, el pecho lleno de una emoción que nunca pensaste que sentirías por él.

"Te odio, carajo".

"Arcontes, espero que todos sus trabajos de investigación sean rechazados".

No. No había forma de que nunca pudieras sentir eso por el.

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me quiero coger a Dottore 😻.

no pude escribir el de Scaramouche xq estoy medio enfermito, y me duele un poco el cuerpo y no aguante estar mucho sentado en la silla frente a la compu, creo q por eso me arden los ojos XD.