Pasamos el resto de la noche compartiendo pequeños besos y más abrazos durante la película. Me sentía completa y feliz, estaba dejando que ella derrumbe mis muros y con gusto la dejaba hacerlo.
Llegó el final de la película y aunque estaba muy cómoda con una Hailee acostada sobre mi pecho, el sueño me estaba atrapando, así que era hora de ir a dormir.
- Hailee, cariño vamos a dormir - dije con voz somnolienta
- Pero aquí estoy cómoda - Dice aferrándose más a mi
- Lo se pero estaremos más cómodas con ropa de dormir y una cama suave - Respondí
Al ver que no había respuesta de ella, me moví para atraparla en mis brazos. Ella inmediatamente aferró sus piernas a mi cintura y escondiendo su rostro a en mi cuello.
Al llegar a mi armario, la senté en el mostrador y le pase ropa cómoda para dormir.
- Vístete ¿si? Yo te espero afuera para ir a descansar - Dije mientras salía y ella asintió
Después de alistarme para dormir, apareció Hailee lista para dormir. Le agarre la mano y la guíe en el cuarto de invitados
- Muy bien, este es el cuarto de invitados, lo que sea que necesites lo vas a encontrar ahí dentro, bueno descansa - Le dije yéndome hacia mi habitación
- Está bien... espera ¿que? - Pregunta sorprendida y obligándome a detenerme y mirarla
- ¿Que sucede? - Pregunto confundida
- Me vas a dejar aquí en esta habitación sola, porque si nadie te lo ha dicho esta es una habitación tenebrosa - Dice apuntando la habitación
- Bueno no creí que querías dormir conmigo tal vez querías privacidad - Dice mirando el piso
- Pues te equivocas, ahora llévame a tu habitación porque ni creas que voy a dormir sola - Dijo tomándome de la mano
- Está bien, es solo que... - Dice jugando con mis pies en el piso
- Es solo que ¿que? - Pregunta
- Yo jamás he dormido con alguien una noche completa en mi cama - Dije nerviosa
- ¿Queeeeeeee? - Dice sorprendida
- O sea si he dormido con gente pero llega un punto en la noche en la que no soporto más estar compartiendo mi cama y entonces les pido que se vayan o les mando a la otra habitación, quiero dec...- fui interrumpida de mi divagación por los labios de Hailee un beso dulce.
- Hey tranquila, está bien no tienes porque preocuparte. Para todo hay una primera vez, pero si te sientes de esa manera puedo dormir en el cuarto de invitados - Dice de manera cariñosa soltando mi agarre para irse.
Rápidamente vuelvo a sujetar su mano - No, por favor. Quiero... quiero que vengas conmigo - Dije mirando el piso
- Eres linda cuando estás nerviosa - dice provocando que me sonroje - Ahora ven vamos a dormir.
Una vez en la habitación, Hailee hace que me recueste debajo de las sábanas. Me acomode dentro de la cama un tanto nerviosa, rápidamente Hailee se mete bajo las sábanas y acostándose sobre con un rostro en el hueco de mi cuello. Me tensé por ese gesto, cruzando mis brazos sobre sus espalda muy nerviosa, pero no me sentía incómoda simplemente era algo nuevo para mi. Algo que Hailee sintió
- Oye tranquila si, relájate solo cierra los ojos y respira profundo - Dice en mi cuello haciendo que su aliento me ponga los pelos de punta. Sentí como sonrió por mi reacción y dejo un beso en mi cuello
- Está bien - Dije cerrando los ojos tratando de calmarme.
- Buenas noches Hailee - Sonreí y acariciaba su espalda
- Buenas noches t/n - Responde con voz somnolienta
Aunque al principio me costó conciliar el sueño, escuchar la respiración de Hailee me tranquilizo y gracias a eso puede caer en un sueño profundo.
Lentamente abrí los ojos al sentir que un rayo de luz me daba directamente en mis ojos, una vez de recuperar mi visión, sentí un cuerpo sobre mi. Fue ahí donde recordé la noche anterior. Hailee
En menos de un día ella estaba haciendo de mi a su gusto y no me molestaba. Ver su rostro en la mañana fue suficiente para alegrarme el día, la forma en la que su cabello caía sobre su rostro y sus abrazos aferrados a mi cintura. Moría de amor. Algo en mi se sentía cómodo tal vez demasiado. Salí de mi trance de amor y decidí hacer el desayuno. Me moví sigilosamente para no despertar a Hailee, sin antes dejarle un beso en su frente.
Baje a la cocina y empecé hacer el desayuno y ponerle algo de comida a martini. Después de un rato escuche como alguien se acercaba a la cocina
- Oye no me gusta despertar sola - Dice haciendo puchero
- Lo se lo siento, es que decidí hacerte el desayuno, ¿Que opinas de waffles para el desayuno? - Digo mostrándole los waffles que estaba haciendo
- Me encanta eso, pero para la próxima me despiertas - Dice acercándose a mi
- No sabía que iba haber una próxima vez Steinfeld- Dice imitando su acción susurrando como si alguien nos fuera a oír
- Tal vez lo halla - Finalmente compartimos un beso, que mejor que recibir el postre antes del desayuno. El beso se estaba tornando intenso, sujete a Hailee de la cintura subiéndola a la isla de mi cocina, roce la lengua sobre su labio inferior pidiendo acceso que ella felizmente accedió, nuestras lenguas peleaban por el dominio pero no iba a permitir que me gane. Ella gimió cuando gane nuestro concurso de dominio. El mejor sonido que escuche. Mientras seguíamos besándonos, llegó a mi un olor a quemado, que rápidamente me hizo reaccionar. Me aparte del beso de mala gana, viendo a un waffle quemándose.
- Diablos - Maldecí sacando el waffle de la waflera todo quemado. Mientras que Hailee respiraba con dificultad por nuestro beso y riéndose por la situación
- Me distrajiste Steinfeld- Dice preparando otro waffle y sonriendo al escuchar su risa.
- Por lo que parecía lo estabas disfrutando - Dice sonriendo
- Tal vez un poco - Dice acercándome nuevamente a ella
- ¿Tal vez? - Pregunta sonriendo
- Tal vez - Dice más cerca de su rostro
- Mmmm tal vez - Dice acercándose. Nuevamente compartimos un beso, pero este más tranquilo más dulce.
Mientras desayunamos, hablábamos sobre nosotras y nos reíamos juntas
- Entonces... - Dice jugando con el waffle
- ¿Entonces? - pregunté
- ¿Cuál es el plan de hoy? - Pregunta finalmente
- Eso, señorita Steinfeld es una sorpresa, así que termina tu waffle y prepárate que tenemos un largo camino que recorrer - Dije levantándome de la mesa
- Está bien, muero por saber a donde iremos - Responde con la boca llena de su waffle para acabar rápido.
Yo reí ante la escena pensando en cómo ella puede ser tan tierna. Una vez ella acabó, nos fuimos a preparar para lo que íbamos a hacer.
En el auto Hailee no paraba de preguntar hacia donde nos dirigíamos y cada vez le decía que era sorpresa. Acudí a otro recurso y subí el volumen de stereo, haciendo que Hailee me mira con la boca abierta, pero terminó cantando lo que sonaba en la radio.
Antes de llegar a nuestro destino, le pedí a Hailee que se cubriera los ojos, lo que hizo a regaña dientes. Una vez llegamos vi el lugar, simplemente hermoso. Me baje del auto y fui al lado de Hailee ayudándola a bajar.
- Muy bien ahora te voy a destapar los ojos - Dije soltándole la venda que cubría sus ojos. Hailee parpadeo un par de veces para adaptar su vista y vio el grandioso lugar.
- ¿Que lugar es este? - Pregunta con su rostro mostrando admiración por el lugar.
- Te presento a mi cabaña, aquí vengo cuando quiero relajarme o simplemente desaparecer del mundo - Dije llevándola a dentro del lugar
- Es hermoso - Dice admirando el lugar rústico
- Ven quiero mostrarte algo - Dije guiándola a la parte de atrás de la cabaña
Cuando llegamos a atrás, la cara de Hailee era un poema. Estaba completamente asombrada.
- Te presento a albóndiga y taquito. Son mis caballos - Dije mostrándole a un caballo negro y a otro blanco con manchas negras
- Esto es increíble - Dice acercándose a los caballos y acariciandolos. Sonríe ante la vista, hasta que vi a una Silueta acercándose a nosotros.
- Rodrigooo - Digo emocionada abrazando a la persona que contrate para viva y cuide de los caballos
- Hola t/n - Dice abrazándome de vuelta
- Hailee este es Rodrigo, un amigo que cuida de mi cabaña y esta es Hailee una invitada muy especial - Ambos se estrechan las manos sonriéndose amablemente.
- Realmente es una invitada muy especial. La señorita T/N no trae a nadie aquí - Dice Rodrigo haciendo que me sonroje y mire a mis manos
- ¿En serio? - Pregunta Hailee mientras me miraba
- Si enserio, dice que este lugar es muy especial para mostrárselo a cualquiera - Dice Rodrigo exponiéndome aún más.
- Basta de hablar de mi, ¿Donde está maria y los niños?- Pregunté queriendo cambiar de tema
- Ellos fueron a la ciudad ha hacer algunas compras, pero pronto estarán aquí. Van a estar feliz de verte -
- Y yo estaré feliz de verlos - Respondí - Bueno ahora vamos a dar un paseo sobre los caballos, luego regresamos - Le dije a Rodrigo
- Si necesitan algo díganmelo - Dice apartándose de nosotras.
- Muy bien ¿Cuál quieres montar? - Le pregunté a Hailee
- Quiero el blanco parece una vaquita - Dice saltando de la emoción
Subimos a los caballos y empezamos a montar por todo el terreno de la cabaña. Compartíamos conversación sobre el lugar y mis planes para el lugar.
- Entonces, quiero producir mi propio vino, por eso este lugar es grande pero aún falta mucho para hacer eso - Dije contándole lo que quería hacer
- Eso suena maravilloso, no puedo esperar para probar tu vino - Dice mirándome
Sonreí y vi que ya estaba atardeciendo. Ni siquiera me di cuenta del tiempo.
- Deberíamos volver, ya está atardeciendo y ni siquiera hemos comido - Dije dándome cuenta de eso
- No me di cuenta de eso - Responde Hailee sorprendida
Volvimos a la cabaña, y saludamos a la familia de Rodrigo mientras nos invitaban a comer un poco. Después de una deliciosa cena nos despedimos de la familia y nos dirigimos nuevamente a la cuidad.
Me dirigí a casa de Hailee porque el fin de semana había acabado y ambos teníamos una semana muy ocupada. Yo tenía una carrera el fin de semana así que debía prepararme. Después de un largo recorrido llegamos a casa de Hailee.
- Bueno llegamos Steinfeld, la pase genial este fin de semana. Realmente me gustaría conocerte mejor - Respondí mirándole a sus ojos profundos
- Yo igual espero seguir vie...- Su rostro cambió totalmente de una hermosa sonrisa a una mirada confusa
- ¿Que que sucede? - Dije sintiéndome de la nada muy nerviosa
- Yo lo siento, creo que no nos podemos seguir conociendo de esa manera - Dice mirando a sus manos y yo realmente estaba sorprendida.
- ¿Que? - Pregunta muy sorprendida y triste
- Yo realmente lo siento T/N. Creo que ya no nos deberíamos ver - Dijo triste y sentí que me estaban rompiendo y corazón y pisoteando los pedazos
- Está bien, es bueno saber eso ahora - Dije inexpresiva, no quería que viera como me estaba lastimando
Ella me mira por la forma en que la respondí y agacha su mirada - Adiós T/N - Dice bajándose del auto. No respondí. No entendía porque el cambio repentino de su comportamiento pero aún así me lastimó y vaya que me lastimo.
Arranque el auto arrepintiéndome de mis actos de este fin de semana, le permite jugar con mi corazón.
Me destruyo
