«Creo que soy bisexual».
Mis manos temblaban al enviar el mensaje. ¡Toda yo temblaba al enviar el mensaje! Pues eso era algo que quería compartirte desde mucho tiempo atrás, ya que era una duda existencial que había estado rondando en mi cabeza desde hace un año atrás y, tal vez, si te lo decía me ayudarías a aclarar eso.
O por lo menos eso me decía a mi misma, siempre intentando crear excusas para decidirme si debía decírtelo o no; porque yo no dudaba, yo ya estaba segura de mi bisexualidad para ese entonces, pero ¿Sabes lo difícil que es ser bisexual en una familia que te ha criado con la palabra de Dios a toda hora y que miran juzgando a todo lo que no está acorde a la biblia? Si antes me sentía como la oveja negra de la familia, pues en ese momento simplemente no me sentía parte de mi familia... Y tenía miedo de que te espantaras, de que reaccionaras como sé que reaccionará mi familia cuando se enteren.
Pero eso era algo que simplemente no te quería ocultar.
Podía ocultarte mi obsesión por ser la estudiante perfecta, así también como mis diferencias con mis padres y hermanos, incluso todos mis miedos, porque que tal vez eso era algo que irías descubriendo con el tiempo, pero mi sexualidad era algo que podría ocultar como una profesional.
«Puedes tenerme la confianza de contarme todo lo que quieras, no te juzgaré».
Tal vez no sea exactamente eso lo que decía el mensaje, pero es un resumen de lo que dijiste y debo admitir que estuve a nada de llorar cuando leí esas palabras en tu chat. Porque mi mejor amigo solo me había dicho que era nada más que una etapa de confusión, y otro amigo me había aconsejado que no me esforzara tanto en buscar respuestas y que me dejara llevar, pero todas tus palabras me hicieron entender que, sin importar lo que descubriera o decidiera al final, estarías ahí para mí... Y yo necesitaba eso, que las personas a las que quiero se queden conmigo sin importar lo extraña o distinta que puediera llegar a ser.
Esa noche pude sentir tan cálido mi corazón que dormí tan plácidamente, como no lo había hecho desde hace tantas semanas atrás.
Mi novio me aceptaba.
¿Cuántos chicos en el país en el que vivimos aceptarían que su novia fuera bisexual? Yo creo que muy pocos, y tenía la suerte de que mi novio fuera de esos pocos.
Todos tus mensajes que me daban a entender un "confía en mi" hicieron que mi corazón quisiera deshacerse por completo de su armadura y, una vez más, tuve que luchar con toda mi voluntad para mantenerla en su lugar, pero, con el pasar de los días, esa armadura iba cayendo poco a poco, hasta quedar por completo al descubierto ante ti, sin tan siquiera importarle si lo notabas o no.
Y estuve bien con eso durante un periodo de tiempo... Durante un muy corto periodo de tiempo.
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Un amor a medias.
Romans«No me cuestiono nada de lo que sentíamos, pero a veces quisiera saber qué pasaba por tu cabeza cada que hablabas conmigo». Luego de un corazón roto, nos invaden las dudas e inseguridades, los "¿algo de eso fue real?" llenan nuestros pensamientos, p...