Una Chica de Otra Realidad (Hipo y tu)

capitulo 13

La puerta secreta

Narradora:

Sebas le dio la llave a la pequeña alix, esta se la entrego a su abuela y ella fue a abrir la puerta

Al entrar se tuvieron que agachar ya que la puerta era muy pequeña, pero por dentro era grande

Los adultos se sorprendieron al ver todo lo que había adentro

Alix: _____ es una fanática de las cosas ocultas -dijo orgullosa-

Sebastián: si, hasta puedo procurar que tiene muchos pasadizos ocultos en toda la casa, y también seguramente tiene escondites como los que abrió Alix

Mamá: ¿Sebas tu sabías de esto? -pregunto un poco seria-

Sebastián: nop, pero Alix si -sonrio-

Todos miraron a la pequeña

Alix: que puedo decir? -puso su mano en su barbilla- ¿Favoritismo? -alzo sus hombros-

Papá: no... pero lo que si es que tu nos tendrás que enseñar dónde estan esos pasadizos secretos -dijo serio-

Alix: lo lamento señor papá -cruzo los brazos- pero prometí guardar los secretos de mí hermana -dijo reusandose a contarle-

Papá: pero prácticamente nos mostraste dos de estos -dijo confundido-

Alix: lo hice porque quiero a mí hermana devuelta

Sebas: queremos -la corrigió- la queremos aquí, en donde sea que este, seguramente la está pasando bien

Abuela: ¿como lo aseguras? Seguro está sola y asustada -hizo como un gesto de preocupación-

Alix: Nana lo último que _____ tiene es miedo, a dónde sea que vaya, ella se divierte, aún que esté en peligro -susurro lo último-

Sebastián: ella tiene razón, a ella no le importa si está en peligro, para ella todo es un juego, según ella es invisible -recibe un codazo de la menor- ¡auch! -se quejo- digo invencible -alix se golpeó la frente-

Abuela: bueno ya basta, busquemos ese libro

Empezaron a buscar el libro por toda la biblioteca

Sebastián: a todo esto... ¿que libro buscamos? -dijo devolviendo a su sitio un libro qué tenía en manos-

Mamá: uno que se llama una leyenda mal contada o algo así -dijo dudosa-

Alix: a verlo dicho antes -puso cara seria-

Alix se dirigió a una parte de esa mini habitación, todos la seguían con la mirada hasta que la perdieron de vista ya que dio una vuelta a la esquina de la mini habitación, y al regresar llevaba un refresco consigo

Papá: ¿y bien?

Mamá: ¿De dónde sacaste eso?

Abuela: ¿a dónde fuiste?

Sebastián: ¿me invitas?

Dijeron los cuatro al mismo tiempo

Alix: uno -señalo a su papá- no sé de que hablas, dos -señalo a su mamá- lo saqué del estante de dulces, tres -señalo a su abuela- solo fui a sacar una bebida, me muero de calor -hizo su pulgar hacia atrás- y cuatro -vio a su hermano- claro -sonrió-

Papá: que sabes sobre el libro?

Alix: ah, el libro -empezo a caminar hacia un estante de libros- ah... -pasando sus dedos por los libros- aquí está -saco un libro- toma -le entrega a su abuela-

La abuela lo empezó a leer y encontró la información que quería

Abuela: aquí está -dice emocionada- dice que:

Hace décadas existían personas que viajaban a otras realidades sin necesidad de escribir en el libro, dice que esas personas no dejan un clon en su lugar, solo desaparecen, y depende de la persona si quiere regresar a su mundo, esto es gracias al anillo del portador, este anillo mágico que se les otorga para poder viajar, reconoce a los antepasados de aquella persona, dice que pueden pasar años, hasta siglos para que nazca alguien así -se sorprende- las personas que viajan no saben cómo regresar, tampoco recuerdan quienes son, lo que si es seguro es que mientras aquí pasen horas, minutos o dias, allá pasarán meses, años, siglos -se asusta- nadie sabe dónde específicamente los manda el universo, pero allá ellos son felices.

Abuela: eso es todo lo que dice

Alix: bueno, por lo menos está feliz -sonríe-

Mamá: pero... y si está en peligro? Y si le pasa algo? -empieza a andar de aquí para alla-

Sebas: mamá cálmate -dice viéndola- recuerda que en otras realidades no nos podemos hacer daño

Papá: sebas tiene razón cálmate mujer -la agarra y la abraza- bien llevaré a su madre a descansar -dice viendo a los niños- ustedes cambiense que tiene que ir a la escuela

Alix: pero hoy es sábado!! -quejándose-

Papá: entonces hagan lo que sea pero en silencio -se retira-

Abuela: toma -le entrega la llave a Alix- ya escucharon, no hagan bulla, tampoco travesuras -se va-

Sebastián: que hagamos travesuras dice -mira a su hermana-

Alix: -esta también lo mira- y si hacemos una torta? -sonríe-

Sebastián: claro, no te olvides de quemar la casa -ríe-