¿Quién es ese Pokémon...? (Ori En Pokémon)

Capitulo 1: Gloria

¿Quién es ese Pokémon...?

Gloria estaba pensando en esa pregunta, sin saber que alguien la asustaría momentos después

- ¡BUENOS DÍAS!-

El grito sonó por toda la casa, la pobre Gloria dio un saltó de el susto, así como un grito ensordecedor.
Al ver de dónde venía el sonido pudo ver a alguien a quien ella conocía.

- Mamá, casi me matas del susto...-

Dijo con un tono asustado todavía, pues a nadie le gusta despertar y lo primero en tener en el día es un susto.

- Perdoname hijita, no era mi intención asustarte.-

Decía su madre con una sonrisa. Gloria solo suspiro.

- Buenos días, mamá....-

Contesto la hija, siendo abrazada casi al instante por su madre.

- ¡Que bueno que mi hijita este bien!-

Decía su madre mientras abrazaba a Gloria, parecía como si no se hubieran visto en años.
El momento de amor fue interrumpido por una pregunta de la madre.

- Umm... Hija... ¿Qué es eso?-

Ambas se soltaron del abrazo, la madre de Gloria señaló a la cosa que vio, Gloria también lo observó y vio la hoja blanca.

- Oh... Lo encontré en el árbol del pateo trasero.-

Contesto Gloria a la pregunta de su madre.

- ¿En serio? Jamás había visto algo así en mi vida...-
- Es en serio. Me sorprendí cuando la vi y decidí traerla.-
- Hmmm... Bueno, aprovechando que estás aquí, tal vez puedas dársela a la investigadora Sonia para que la analicé.-

Fue la propuesta de la madre de Gloria, no era una mala idea, pero lo que su madre no sabía es que esa hoja también se transforma en un ser vivo, así que la idea no convenció del todo a Gloria.
El tiempo de madre e hija se vería interrumpido por una llegada inesperada.
La puerta de la casa se abrió.

- ¡Ya llegué!-

Grito el invitado, cerrando la puerta y corriendo a la sala donde estaban Gloria y su madre. Se trataba de su hermano Víctor.

- Hijo llegaste, que bueno. Ven, abraza a tu madre.-

El niño fue a abrazar a su madre.

- Que bueno que mis dos hijitos regresaron.-

Decía la madre abrazando a un niño con cada brazo.

- Bueno niños... Lamento decir esto, pero ya me tengo que ir... El negocio no se va a atender solo, mañana prometo pasar todo el día con ustedes.-

Dijo su madre, soltando a los dos niños y dirigiéndose a la puerta.

- Espero que se porten bien, si tienen hambre prepárense algo. Si van a salir, cierren bien la puerta. Regreso en la noche. Los quiero.-
- Si mamá.-