Capitulo 4: Todo esfuerzo tiene su recompensa

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Fue una experiencia maravillosa, un combate espectacular, cada movimiento de Ori, cada estrategia... Fue único para la gente que presenció el show. Lo que no fue maravilloso... Fue tener que esquivar a la multitud de gente que bombardeó de preguntas, elogios, aplausos y felicitaciones.
Esto último fue lo que tuvo que soportar Gloria, ella de encontraba fuera del gimnasio de la ciudad... Ella estaba respirando de manera agitada, llegó un punto en el que ella tuvo que correr a la salida para evitar más preguntas de parte del público. Tomo su medalla e inmediatamente mucha gente del público, como reporteros se acercaron a bombardearla con preguntas relacionadas con Ori, el "Pokémon peculiar", cuya presencia ahora se reducía a una hermosa hoja blanca que ahora estaba segura en la mochila de Gloria.

- Gracias a Arceus finalmente pude salir del estadio.-

Se dijo a si misma la joven, cansada de haber corrido por todo el estadio. Ahora estaba fuera del mismo, ya con su ropa cotidiana.

- Bueno... Ahora que gane la medalla, creo que debería regresar a casa a prepararme para seguir con el viaje...-

Se dijo si mismo Gloria. Ahora podía preparar su mochila para no tener complicaciones en su viaje, y tal vez, tome un descanso para estar con su madre ayudando en la cafetería Eeveelution.
En el pueblo Pueblo Amura/Hulbury hay una parada de trenes, ese tren la puede llevar a Pueblo Par/Wedgehurst, así poder llegar a su hogar más fácilmente, con suerte, no tendría problemas. Ella comenzó a caminar a la para de trenes, para su suerte, la gente que presenció todo lo sucedido en el estadio no estaba presente cerca de ella, mucha gente ni la volteaba a mirar, esto relajaba mucho a Gloria. Pero cuando ese encuentro sea subió a Pokenet, es ahí cuando su fama va a explotar.

Gloria solicito el boleto para poder viajar por el tren, para su suerte, el tren no tardó, ella abordo el tren y se sentó mirando la ventana, los bellos paisajes de Galar, la región de los fenómenos Dinamax, con el área salvaje de Pokémon como la pieza principal de la belleza de Galar. Algún otro día iría a otra región, pero hoy tenía que festejar con su familia su medalla del gimnasio de tipo agua. El tren tomo 2 horas en llegar a Pueblo Par/Wedgehurst, la estación más cerca al hogar de Gloria. Ella bajo del tren, y se estiró un poco, ya que todo el camino fue sentada, de camino a su casa. Aún que, una pequeña parada al centro Pokémon más cercano fue necesario, pues la pequeña Eevee y Farfetch'd seguían debilitados por el combate disputado. Gloria entro al centro, y fue al mostrador donde había una enfermera de cabello rosado.

- Buenas tardes enfermera.-

Hablo cortésmente Gloria.

- Saludos pequeña, ¿Que podemos hacer por ti?-

Pregunto la enfermera.

- Mis Pokémon tuvieron un enfrentamiento de gimnasio, y se encuentran debilitados. ¿Podría ayudarlos a sentirse mejor?-

Pregunto Gloria, tan inocente. Ella se encontraba sacando las Pokébolas de su mochila y las coloco sobre el mostrador.

- ¡Por supuesto que te ayudaremos!, A eso nos dedicamos en los centros Pokémon.-

Dijo la enfermera mientras sostenía las 2 Pokébolas.

- En un momento te los traigo de vuelta.-

Hablo la enfermera para colocar ambas Pokébolas en una máquina, era la máquina la cuál se encargaba de sanar todas las heridas de un Pokémon y regresarle todas su energías. Una vez curados los Pokémon, la enfermera devolvió las Pokébolas a Gloria.

- Gracias enfermera, tenga linda tarde.-

Contesto Gloria mientras salía del centro Pokémon con sus Pokémon recién curados.

¿Quién es ese Pokémon...? (Ori En Pokémon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora