Extra: La vida cotidiana.

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Para Ye Shu, la vida después del matrimonio no fue diferente a la de antes.

Después de someter a Xia del Oeste, Changlu tuvo un largo período de paz. Según la trama de la novela original, era el turno del Gran Yan de ser tomado. El Gran Yan estaba ubicado en el sur y era mucho más fuerte que Xia del Oeste. Naturalmente, no era algo que pudiera resolverse enviando tropas.

Ahora que Yu Yan estaba aquí, Jin Wang no tenía intención de declarar la guerra.

Simplemente dejó ir a Yu Yan y tomó el poder, mientras que Changlu lo ayudó en secreto. Cuando llegara el momento, ¿no les correspondería a ellos discutir cómo deben interactuar los dos países?

Con el mundo en paz, Ye Shu y Jin Wang finalmente pudieron concentrarse en criar a su hijo.

Después de que Xiao Ye-zi cumpliera un año, su apariencia maduró gradualmente. Sus cejas también parecían estar talladas en el mismo molde que las de Jin Wang. Solo sus ojos estaban ligeramente inclinados, viéndose como flores de durazno en ellos. Cuando sonreía, no era diferente de Ye Shu.

Ya se podía ver que crecería para ser una belleza que podría traer el desastre al país.

El cuerpo de Xiao Ye-zi era muy saludable y naturalmente muy activo. Era incluso más animado que otros niños de su edad.

Después de aprender a caminar, le gustaba correr por el patio. Cuando se volvió salvaje, nadie pudo atraparlo. Además, este niño no lloró ni hizo un escándalo cuando se cayó. Se palmeó la ropa y siguió corriendo como si tuviera una energía infinita.

Cada vez, Ye Shu estaría medio muerto de miedo. Solo podría relajarse después de que los sirvientes cambiaran todos los muebles que podrían volcarse fácilmente.

"... ¿A quién crees que se parece en su personalidad?" Ye Shu miró a través de la ventana a su hijo que estaba librando una batalla de ingenio y coraje con los sirvientes en el patio.

Jin Wang dejó de pasar las páginas del libro y dijo sin levantar la cabeza: "No me mires. Cuando era joven, no era bueno en los deportes. Mi madre me obligó a practicar artes marciales".

Sus palabras no eran incorrectas.

Jin Wang cuando era joven era algo débil. También era tranquilo y sensato por naturaleza, por lo que no correría así.

Ye Shu asintió inconscientemente, pero inmediatamente sintió que algo andaba mal, "¿Estás diciendo que todo es mi culpa? ¡Yo no era así cuando era joven!"

Eso fue porque no tuvo la oportunidad.

Cuando era joven, no tuvo la oportunidad de aprender a caminar.

Sin embargo…

Jin Wang lo miró. Sus labios se curvaron cuando dijo suavemente: "Cuando te conocí, eras como Xiao Ye-zi es ahora".

Ye Shu: "..."

En ese momento, Ye Shu acababa de recuperar sus piernas y le encantaba arrastrar a Jin Wang por el palacio para jugar. Saltaba arriba y abajo y estaba lleno de curiosidad por todo.

No fue hasta que la madre de Jin Wang fue degradada y los tres se mudaron a la Residencia Fría que Ye Shu se calmó gradualmente.

Ye Shu se quedó en silencio por un momento. Se negó a admitir su oscura historia. "Estás diciendo tonterías. Voy a jugar con mi hijo. Te estoy ignorando".

"¡Principito, ten cuidado!"

Ye Shu acababa de salir del salón cuando una pequeña figura corrió hacia él y saltó a sus brazos. "¡Papi, papi!"

El Emperador Enamorado Del Primer Ministro Rebelde (Y Transmigrado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora