Capítulo 5

29 4 0
                                    

Entramos al restaurante y nos sentamos en una mesa, cuándo trajeron los últimos platos que pedimos, fui a la barra y les dije que si podían prepararnos un postre, tenían a la carta tarta de chocolate y la pedí, dibujaron un anillo en el trozo de pastel y cuándo les hice una señal, trajeron el trozo de pastel, con una vela, chuches de fresa en forma de flores con nata y fresas, se impactó y sus mofletes se pusieron rojos, me agaché en el suelo, saqué una caja de un bolsillo de mi chaqueta, abrí la caja y le pedí matrimonio, Violet se puso tan emocionada, que se puso a llorar, a saltar de la alegría, me abrazó tan fuerte que me quedaron marcas rojas, se alejó, subió la cabeza y me dijo con todas sus ganas, que quería casarse conmigo, me quedé tan agusto, aliviado, contento y alegre, que no sabría cómo describir ese sentimiento en uno sólo, la quería, la amaba, la deseaba y no quería perderla. En el hotel, nos hicieron una fiesta y nos lo pasamos muy bien, bebimos zumo de sandía y de fresa, los dos estaban muy buenos, el de sandía nunca lo habiamos provado y nos fascinó, vino mucha gente a la fiesta y fuimos los anfritiones, nos pusimos a bailar, también pusieron música lenta para bailar en parejas, nos pusieron dos coronas a los dos, fue una experiencia increible. Salimos a fuera a tomar el aire, la miré a los ojos a Violet y me acerqué, le acaricié un mechón de pelo con la otra mano le cogí su carita y la acerqué a mí, la volví a mirar a los ojitos, le miré su boquita, sonreí, y la besé despació, me alejé y le dije que la amaba y que siempre la amaría, la besé por el cuello, le pusé la mano en el hombro posterior, y fuimos a la habitación, sobre todo nos besamos, no dejabamos de besarnos, sus labios sabían a fresa, cada instante hacía que me enamorara aún más de ella. Durante esos días fuimos a bañarnos de noche a la piscina, también fuimos al río, por el pueblo, la mayoria de las veces almorzabamos, comiamos y cenabamos al restaurante, nos lo pasamos bastante bien, era muy tranquilo e inspirador. Pasaron unos meses y Violet y yo nos casamos, llevaba un vestido negro hermoso con el pelo recogido con un moño precioso, unos tacones morados, iba tan preciosa que sentía que el corazón iba a explotarme en ese día, los anteriores y los posteriores, me sentí tan vivo, emocionado, alegre y sobre todo feliz, en nuestra Luna de Miel nos fuimos a las Bahamas, fué una experiéncia increíble y al llegar estudié para ser cocinero, después los años que tuve que hacer para ser cocinero, monté mi restaurante, nos fuimos a vivir juntos Violet y yo, ella se estaba sacando la carrera para ser psicologa, eramos muy felices, veiamos muy seguido a la familia de Violet, cenabamos juntos dos veces a la semana, era increible llevarse tan bien con su familia... Esa noche se quedaron a dormir su madre y su hermana pequeña, vimos una peli muy divertida, iba de dos hermanos que hacían muchas bromas a sus padres, sus padres acababan hartos de que les molestaran tanto, que les echaron de casa, los hermanos se fueron a vivir juntos, y cada vez se veían muy responsables, ya dejaron de hacer tonterías y terminaron teniendo hijos cada uno con la mujer de cada uno y ya no vivían juntos pero tenían muy buena relación de hermanos, nos gustó bastante. Nos fuimos a dormir, al día siguiente Violet y su hermana hicieron crepes con fresa, mermelada, mantequilla y zumo de naranja recién exprimido, yo tenía que ir a trabajar por la tarde, fuimos a comer a casa de la madre de Violet, comimos una massa con pimiento rojo, amarillo, berenjena y calabacín al horno con limón y alguna espécie más, estaba bastante rico, también preparamos un poco de ensalada y un poco de pan, para chuparse los dedos, la hermana de Violet preparó fresas con azúcar y nata, también bebimos zumo de sandía, todo estaba riquisimo. Por la tarde tuve que ir a cocinar a mi restaurante, la madre de Violet atendía la barra y las mesas, Violet hacía un poco de todo, por suerte, los tres ganábamos bastante dinero, yo era el dueño del restaurante, por lo tanto Violet y yo teníamos más dinero juntamente, la hermana de Violet alguna vez nos hacía la compra, la verdad estaba contento de tenerlas cómo família y a Violet cómo esposa, era fantástica, tenía lo que tenía gracias a ella, me salvó de muchas cosas, era la família que no había tenido nunca, quería muchísimo al abuelo, murió y la verdad sigo apenado, estará siempre en mi corazón y en uno de mis recuerdos más preciados. Llegamos a casa de tanto trabajar, Violet le faltaba poquísimo para terminar la uni, estaba muy orgulloso de ella, era un diamante con infinitos colores preciosos, era increíble, nunca la olvidaré, todo lo que me hizo aprender sobre la vida, sobre los valores y la amaré siempre, pertenecerá siempre en mi corazón y en mis recuerdos más preciados.

Una simple coincidenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora