Capítulo único

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Sus manos no paraban de sudar y en su estómago sentía un fuerte hormigueo. Se encontraba tan nervioso que en cualquier momento creía que se iba a desmayar.

Eran casi las siete de la tarde, había invitado a su amigo a pasear como solian hacerlo, pero hoy era distinto. Esta noche al fin se había decidido a confesarle sus sentimientos. Se sentía inquieto, emocionado y a la vez abrumado por la idea de ser rechazado, temiendo arruniar su larga amistad de más de cinco años.

Se dirigieron a aquella colina, no muy lejos de la ciudad, a la que siempre iban desde que se habían conocido. Era como su lugar especial, algo solo de ellos dos.

La vista era hermosa. Se podían ver los campos verdes, adornados con lindas vincas azules. El firmamento se veía imponente, dejando ver poco a poco sus estrellas mientras el Sol se iba poniendo. Agradecían vivir en un pueblo pequeño que les permitiera ver los astros con más detalle.

Observaron el cielo, admirando su belleza, intentando encontrar distintas constelaciones u otros objetos celestes, pero Naruto estaba obnubilado por la belleza de Sasuke. Sus finos cabellos negros se meneaban con la fresca brisa de verano y en la profundidad de esos ojos ónix se reflejaban las miles de estrellas que sobre ellos brillaban. Juraría que bajo la luz de la luna resplandecía, como si de un ser mágico se tratase. Para Naruto, Sasuke era mágico.

El rubio estaba fascinado con lo que sus ojos veían. Aquellas estrellas que adornaban el cielo se sentirían abrumadas al verlo, y hasta la luna misma ha de sentir envidia de su belleza. Sin dudas lo amaba, lo amaba y no encontraba palabras en el mundo que pudieran describir lo mucho que lo hacía.

Entonces se miraron. No dijeron palabra alguna, solo se dispucieron a disfrutar del contacto visual que el otro le brindaba. Se encontraban nerviosos, sus mejillas, que se hallaban teñidas de un tierno color rojo, ardían.

- Yo... hay algo que te quiero decir - dijo el blondo rompiendo finalmente el silencio. Sentía que iba a explotar y el hormigueo en su estómago era más fuerte que nunca, como si dentro de si llevase un enjambre de abejas furiosas.

- Desde hace tiempo te lo quería decir, pero no encontraba como y... - la mirada atenta del azabache sin duda lo ponía aún más tenso - Sasuke, tu- -

- ¿Quieres ser mi novio? - se le adelantó el pelinegro.

Naruto se quedó estático por un momento, no lo podía creer. Fue tanta su felicidad que no pudo evitar abalanzarse hacia él, cayendo ambos sobre suave hierba.

El de ojos azules, aferrado a su cuello, y prácticamente sollozando, no hacía más que asentir con su cabeza hasta que pudo recuperar la copostura y emitir un "Si".

- Sasuke, te amo - soltó Naruto contento.

- Yo también te amo - respondió el joven de diecisiete años mirándolo enternecido.

Ambos se quedaron en la posición en la que cayeron, cómodos, abrazados, acostados en el césped mientras veían la inmencidad de la bóveda celeste, disfrutando de la cálida compañía que se brindaban el uno al otro, y con las mejillas enrojecidas, Naruto dejó sobre la mejilla de su ahora novio un tierno beso, haciendo al otro chico sonreir y teñir su cara del mismo color.

FIN

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Starry Night 「Narusasu」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora