Capítulo 2: La interrupción
- Sofí… - le dije apenado – lo siento.
Ella no decía nada, yo solo comencé a acariciarle el cabello.
- Sofí, no llores, ya no te diré nada, lo siento – le dije tratando de calmarte.
- Es que… tu siempre me escuchas y me aconsejas, yo no sé qué hacer – me dijo mirándome a los ojos.
- Ya me escuchaste, eso es todo lo que necesito – le dije sonriendo.
Ella se me quedó mirando mientras se secaba las lágrimas con su blusa, yo la detuve con la mano. Tomé un pañuelo que tenía en la mesita que había al lado mío y le comencé a secar las lágrimas, no se veían bien, le quitaban belleza a sus hermosos ojos.
Sofía…
Dustin es el mejor hombre que he conocido, me está secando las lagrimas, ni un hombre me había hecho eso, ninguno de mis novios ni siquiera, si me veían llorar simplemente miraban a otro lado, ni me abrazaban, o me acariciaban el cabello, como lo hace Dustin…
- Perdón por ser mala amiga – le dijo mientras quito su mano, ya no quedaban mas lagrimas que secar no sé por qué seguía haciendo eso.
- No eres mala amiga, ven – dijo él indicándome que me acercará. Me puse al lado de él, esta vez más cerca – acércate – me dijo como si tuviera un secreto que decirme – eres asombrosa – me susurró al oído.
Solo porque no puedo verme a mí misma, o si no estoy segura que hubiera visto destellos en mis ojos. Me encantó que me dijera eso.
Después se alejó un poco de mi y nuestras miradas se cruzaron. Siempre me dijo que adoraba mis ojos, se les quedó viendo mucho tiempo y yo a él. No decíamos nada, eso de cierta manera me incomodaba, lo mejor será que hable.
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No Puedo Caminar, Pero Si Amar
Novela Juvenil- Por favor, Sofí, no te hagas esto – le imploró Dustin. - No puedo dejarte, de verdad te quiero – le dijo ella con lágrimas en los ojos. - ¿Cuándo dejaras de quererme? – le cuestionó su amigo minusválido. - Te dejaré de querer el día que seas capaz...
