False God -MoonSun

Capitulo 4

- Te compensaré por esto, lo siento.- Sun se abraza a mi cintura disculpándose por enésima vez por tener que salir de la ciudad el fin de semana, estamos despidiéndonos en el aeropuerto de La Guardia, dejo un besito en su frente y ella hace un pequeño puchero.- Deberías invitar a uno de tus amigos para no perder el deposito del hotel.- Dice con abatimiento.

- Por supuesto que no, las dos sabemos que Vermont no se ira de ahí así que iremos juntas en otro momento.- Ella asiente poco convencida, hace mucho que no salimos de vacaciones y cuando planeamos algo la llaman porque su jefe necesita a todo su equipo en Paris, es una oportunidad que no puede dejar ir.

- Bien, es cierto, iremos en otra ocasión. Recuerda sacar a Daebakie en las mañanas y tienes que hacer la compra de la semana sino nos quedaremos sin comer, dejé una lista en pegada en la nevera.- Me rio por su cambio de actitud y ella me da un leve golpe en el hombro, mira la hora y suspira de nuevo.- Debo irme ya, te amo.

- También te amo.- Compartimos un beso y me quedo de pie viendo cómo se aleja perdiéndose entre la gente. No tengo idea de que hacer el fin de semana, no quisieron devolver el dinero de la reservación que hicimos a última hora debido a que conseguimos un descuento, pienso un momento en la opción de ir sola pero la descarto enseguida sabiendo bien que ir a Vermont es uno de los sueños frustrados de Solar, siempre hay mucho trabajo como para tomarnos un fin de semana.

Al llegar a casa me pongo a desempacar la maleta que tenía ya hecha volviendo a poner la ropa en su lugar y planchando algunas prendas de nuevo, la casa se encuentra en silencio porque Daebakie esta con su niñero todavía y no iré por él hasta en dos horas por órdenes de Sun y recomendación del chico quien dijo algo sobre dejarlo adaptarse. Reviso la lista de compras y suspiro con cansancio anticipado de solo pensar en cargar sola esto a casa porque solemos ir juntas, los fines de semana es cuando podemos hacer cosas para la casa así que siempre hacemos compras, limpieza general, lavandería y más, por supuesto que teníamos planeado un itinerario para esta semana debido al presunto viaje pero con el cambio de planes me ha quedado todo el trabajo a mí.

Comienzo a hacer una lista de cosas por hacer en mi teléfono y conforme crece me doy cuenta de lo mucho que necesito un auto, cuando lleguen los niños solo se multiplicaran estas tareas así que sería más fácil tener un transporte propio... debimos planear mejor esto seguramente.

Sun regresará hasta el martes o tal vez el miércoles porque un diseñador esta dándoles una exclusiva sobre su nueva colección y es un enorme evento que necesita ser cubierto por la revista, harán un enorme especial y este es el primer año que es invitada a algo así. No recuerdo la última vez que estuve sola por tanto tiempo, desde que me mude a Nueva York comencé a vivir en una residencia estudiantil proporcionada por la universidad y cuyo costo se incluía en mi beca, tuve dos compañeras de habitación en los cinco años y al graduarme simplemente pensaba en volver a Corea o irme a vivir en un pequeño departamento que compartiría con Sun después de que ella se graduase si conseguía un empleo antes de que expirase mi Visa estudiantil y para mi suerte uno de mis profesores me recomendó para una pasantía en Borkin Books.

Me paseo por el vestidor buscando la caja donde Solar guarda los números que tienen un artículo suyo que le gustó especialmente, que me gustó a mi o que fue muy bien recibido por sus jefes o la crítica en general, encuentro la pesada caja casi en el fondo de su lado entre vestidos largos de gala y la pongo en el suelo sentándome para hojear un par de revistas. Ella tiene una forma refrescante de escribir que hace de sus columnas algo interesante, podrían tratarse de artículos sobre cinturones masculinos color marrón y ella encontrara la forma de hacer que los lectores no pasen la página, encuentra las palabras correctas junto con la información necesaria y las mejores fotografías.

No guardó copias de todos los números en los que ha tenido publicaciones porque le parece egocéntrico así que siento curiosidad por cuales cree que son los mejores, recuerdo la mayoría ya que siempre me pide revisarlos mientras bromea que es bueno tener una editora en casa. Tiene el primero, por supuesto, también hay uno del mes de su cumpleaños, de nuestra boda, mi cumpleaños... tiene números de fechas importantes y después son al azar. El número del último mes no está en ningún lado ¿No le pareció importante la fecha de la inseminación? A ella le regalan una copia cada mes así que deliberadamente lo dejó en la oficina porque no lo vi por la casa tampoco, se supone que convertirse en madre era su sueño dorado. Vuelvo a meter todo en la caja con cuidado de no estropear nada antes de volver a ponerla en su lugar, reviso la hora y salgo de la habitación para ir por Daebak.