El supremo viene

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    Cuando sonó el comunicador, Calvin estaba sentado en el campo de flores cuidadosamente administrado por la gente fuera del reino.

Miró hacia la cúpula del distrito, que ahora estaba cubierta con tuberías desvencijadas y soportes de metal oxidado que podían caer en cualquier momento, y si esa cosa caía, Calvin sin duda se convertiría en un charco de carne. Pero no lo hizo. se preocupaba demasiado por eso, a pesar de que esas partes caían delante de él y detrás de él como gotas de lluvia, de vez en cuando un tornillo o dos caían sobre su cabeza, arañando su cuero cabelludo un par de veces. Una fina mancha de sangre.

Aparentemente, la iluminación había ido terriblemente mal y, por un momento, la iluminación volvía a la normalidad y luego iluminaba todo alrededor del lado de Calvin con una luz más brillante de lo habitual.

Y a veces, Calvin marcaba el comienzo de la oscuridad extrema por un tiempo, con flores plateadas que emitían un brillo azul brillante en su costado.

Este tipo de alternancia de luz y oscuridad le dio a Calvin una extraña ilusión, solo sintió que el tiempo parecía avanzar en un instante, y la alternancia del día y la noche (si todo en la base realmente pudiera llamarse alternancia del día y la noche) ) siguió yendo rápido frente a sus ojos.

Y a veces, el tiempo parece volverse extraordinariamente lento, tan lento que Calvin puede sentir claramente cada latido de su corazón, cada respiración...

Un gran rugido resuena constantemente sobre su cabeza, y el suelo tiembla y tiembla...

Varias chozas simples se derrumbaron bajo la vigilancia de Calvin, y los forasteros que dormían en ellas probablemente habían muerto, los soportes de metal se derrumbaron y el campo de pruebas de circulación automática se había reducido a escombros hace mucho tiempo, en solo unos días. porque, e incluso estuvo dispuesto a dar su vida, ahora se ha vuelto completamente irrelevante.

Todo ha sido destruido, todo se ha derrumbado.

A Calvin ni siquiera le importaba el código del sheriff.

Sacó una pequeña botella de espíritus atesorados de sus brazos.

Con el rugido de la destrucción, innumerables objetos que caen han muerto de sus compañeros, y él está bebiendo el vino traído por la ciudad natal que perdió hace mucho tiempo... El vino es muy fuerte y picante.

Calvin tomó un trago para no terminar el vino antes de morir.

La sensación de estar ligeramente borracho le hizo sentir que todo estaba bien, por lo que cuando sonó la comunicación por primera vez, Calvin incluso pensó que era solo su propia alucinación.

No fue hasta el otro extremo del comunicador que un tipo de la oficina de seguridad tomó la iniciativa de conectar el comunicador sin permiso nuevamente, y Calvin no perdió la cabeza. Resultó que en el último momento, realmente había gente pensando en él.

Del auricular salió la molesta voz del oficial del Servicio de Seguridad.

"Sheriff Calvin, ¿sigues ahí?"

Calvin levantó las cejas.

"¿Raphael?"

Respondió confundido, sin saber por qué lo estaba buscando el tipo: para esas personas, el yo que solo podía esperar a morir probablemente ya no valía la pena.

La calidad de la llamada era muy pobre, y el severo ruido blanco electrónico casi ahogaba la voz de Rafael...

"... Yo... alguien quiere tener una conversación contigo..."