-Te quise.
-Pero no me querías de la misma forma que lo hacía yo.
-¿Por qué hablas en pasado? -preguntó-. ¿Ya no me quieres?
-No -mentira-. Y eso es lo mejor para los dos.
-Tienes razón, es lo mejor para todos -admitió sin saber que mi corazón acababa de romperse.