Capitulo 2

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Abril,06 del 2022

Hoy descubrí algo ... descubrí que mi vida social depende mucho de Grace, para mi mala suerte ella tuvo que regresar a su casa porque se sentía fatal, y aunque ella no es la única amiga en el curso, ya que están: Adela, Molly, y Deyá simplemente me hace mucha falta. Sin ella no es lo mismo.

Este es mi primer año formando parte de su grupo de amigas, ósea nos conocemos desde noveno grado, pero en ese entonces mi mundo giraba alrededor de Amelie, por eso hay veces que me siento desplazada por ellas, Pero quizás solo nos falte tiempo para congeniar mejor, eso espero. 

Molly en los recesos sale con su amiga Alexa que es del mismo curso de Estefan, y Adela se la pasa e interactúa más con Deyá, y la más pegada a mi es Grace, ella es un nori irresponsable, ¿cómo puede ser eso? no lo sé solo Grace puede lograrlo.

 Con ella me entiendo a la perfección, y a pesar de no tener muchas cosas en común, es como si nos complementamos bastante bien. Ella es una pervertida, sarcástica, inteligente y vengativa, mientras que yo por otra parte soy a veces algo reservada, inocente según ellas, amistosa y pacífica, pero aun así funcionamos muy bien.

Suspiro al ponerme a pensar en lo que hare hoy, la desgraciada recién se fue y ya la extraño. Hoy sí que será un muy largo día.

Estamos en clase de inglés, y como Grace no está coloco mi mochila atrás, y me aburro tanto en la clase que hasta pongo atención, cosa que comúnmente no hago. Mas bien me la paso distrayendo a Grace, pero a pesar de eso no estoy mal en calificaciones, y eso se lo debo a ella, ya que cuando se pone en plan: "Madrastra" me obliga a cumplir con mis obligaciones.

Mientras la Lic. Alejandra califica algunos cuadernos, me llama exigiendo mi atención.

Señorita Pérez—me habla— Podría por favor dejar estos cuadernos al tercero "B"—finaliza ella dejando los cuadernos en mis manos.

Oh santa mierda, porque a ese curso, ¿Acaso no puede ir alguien más? Desde que empecé a sentir más que amistad por Estefan he hecho lo más que puedo para alejarme de él, pienso que con un poco de espacio podría aclamar mis sentimientos por él, e ir a su curso no me lo facilita.

Pero no puedo hacer nada, ya que negarme a un pedido de la maestra, podría interpretarse como una falta de respeto. Así que, sin darle más vueltas al asunto, subo las tediosas escaleras hasta llegar al tercer piso donde está ubicado el lugar de mi muerte digo, el tercero "B".

Al llegar a su puerta espero unos segundos hasta recuperar el aliento, por qué diablos eso si fue muy cansado. El deporte no es lo mío.

Toco la puerta, y al instante un chico que por lo que se es Santiago me abre la puerta y todos regresan a ver, hasta Estefan. Doy un pequeño respiro hasta hablar.

—Buenas tardes, Lic. Ceci—le hablo a la profesora de lenguaje, que se encuentra al fondo del salón— La Lic. de ingles me pidió que les diera estos cuadernos—concluyo

Mi plan es darle los cuadernos a Santiago he irme lomas rápido posible, pero antes de que pusiera en marcha mi fabuloso plan, la maestra hablo.

Hola mija—me saluda ella—Claro pasa, déjalos en el escritorio, ya que ahorita están en una prueba y no pueden distraerse—me explica la Lic.

Me quedo en blanco unos instantes, hasta que me adentré al curso, con cuarenta almas que no dejaban de mirarme, como si trajeara algo en la cara o algo.

Sinceramente me enorgullezco de mí misma por no caer de cara, mis piernas me tiemplan por la incomodidad y vergüenza.

¿Han sentido ese tipo de sensación? Es similar a cuando vas caminando por en medio de un montón de chicos, y se te olvida hasta como caminar, así me siento ahora.

Abigail Donde viven las historias. Descúbrelo ahora