Sumisión

Capítulo 4 El maquinomio

Capítulo 4

El maquinomio

 

Después de hacer a lo que íbamos, regresamos a casa ya cansados y hambrientos, por suerte Bolt nos había conseguido la cena, bueno una gallina para caldo. Un momento... ¿caldo? ¿Quién lo hará? No lo había pensado y al menos yo, no sé cocinar tal vez Bill sepa, ya que no creo que Bolt y Kean tengan la más mínima idea de esto, somos inútiles en este aspecto.

- Bueno, emmm pues ¿alguien sabe preparar caldo...? – Les cuestiono algo intimidado, no sé ni por qué, supongo que es porque me siento muy inútil en esta situación. - ¿Bill? ¿Alguien? – sigue un silencio algo incómodo, pero Bolt esboza una risa y me da miedo.

- ¿qué Yagui? ¿Tu mamá no te enseñó algo tan típico y fácil? Dime, ¿te sientes inútil, hermano? – Me contesta Bolt autoritariamente, mientras me rodea con el brazo y yo solamente pongo los ojos en blanco, está más que claro que él nunca ha cocinado.

- Ja ja, ay Bolt pero ¿de qué te quejas? Estoy seguro de que no tienes idea de cómo cocinar una gallina – Espero a ver su reacción pero no cambia, se queda igual y me sorprende.

– Yagui, si algo tú no sabes es que soy un apasionado en la cocina, ¿qué crees que hacía cuando me castigaban? Pues observa cómo cocinaba mi mami, y sí aprendí algo – Intenta lucirse para, no sé la verdad. No-le-creo.

– Pues, no me conocen amigos míos, no crean en mí – Dice un poco decepcionado y se va sin las mínimas ganas para discutir, supongo que se dirige con Bill para preparar el ¿caldo? Tal vez haya dicho la verdad, Kean y yo, por nuestra parte nos miramos bastante sorprendidos no tanto porque Bolt sepa preparar caldo, sino porque se fue sin discutir, tal vez se puso melancólico, aunque para ser sincero nunca lo había visto así, Kean  y yo nos quedamos callados, él se pone a leer los mismos cómics de siempre y yo me pongo a poner todo en su lugar, no tengo nada que hacer y prefiero no ser un estorbo en la cocina, y así me la paso hasta que nos llaman para comer.

– ¿y? ¿Por qué tanto silencio? Díganme si no les gustó la comida, los entiendo, solamente hablen...

– Creo que todos estamos igual, claramente no es por la comida y no nos podemos guardar lo que pensamos o más bien recordamos ¿sí? Mejor hablemos, tal vez nos haga bien. No los culpo por estar melancólicos, yo también lo estoy – Dice Bill cabizbajo y tiene razón no hace daño recordar un poco todos juntos. A recordar con un rico caldo de pollo.

– Nada nada, a mí no me mienten.... No les gustó mi caldo – dramatiza Bolt, ya empezó con sus tonterías –Las papas, verdad, las papas están duras, seguro son las que recogió Kean.

- Por Dios Bolt, ya madura, hablas como un niño de diez, obvio que el caldo nos gustó, cuanto tiempo sin comer así, además el mundo no gira entorno a ti –Le digo un poco exaltado –Además ni tú puedes ocultarlo, tu que eres "Bolt siempre estoy diciendo tonterías y me siento siempre genial" igual estás nostálgico.