Niebla (I)

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Mayo, 2000. Torre del Hokage.

Hinata Hyuga se encontraba en la entrada de la Torre del Hokage, en un acto de conmemoración con el que no estaba de acuerdo.

Luego del paso de unas personas y sin ser descubierta se dirigió hacia la cabeza del cuarto. Cuando se encontró de pie sobre esta admiro lo hermosa que se veía Konoha desde las alturas.- Estatuas de todos los hokages por los cuales ha pasado Konoha. La Torre Hokage, donde se encuentra en estos momentos Kakashi, un estúpido acto que ni siquiera entiendo. Los aldeanos caminan de aquí para acá con bolsas en las manos y agarrando a sus hijos de la otra.- Pensaba que aquel lugar era el menos indicado para recordar a los caídos en la guerra. El techo de aquella torre, rojo como la sangre con el símbolo que los representa y el suelo de madera pulida, nada tenía que ver con la injusticia y el horror de tantas muertes. Todo era demasiado pomposo, demasiado superficial. La alegría que emitían todos después de una muy dura batalla donde perdimos cientos de miles de ninjas, y ellos que? Como si nada!

- Tendría que ser en Konoha.- Pensó mientras escuchaba el discurso de Kakashi. No existía lugar más propio para el homenaje que la aldea en donde se criaron todos esos ninjas. Su primo Neji había muerto, el venía de esta aldea, y la defendía como todo un guerrero, moría por esta aldea. Decenas de personas morían por ella. ¿Cuántos de esos diplomáticos de túnicas y sombreros representativos habían sentido las consecuencias de la guerra? Hinata Hyuga podía apostar, sin temor a perder, que ninguno.

Pero los Kages insistían que la herida aún estaba abierta como para hacerlo en Konoha. Solamente habían transcurrido dos años desde la guerra, los akatsuki fueron derrotados mientras que algunos de sus seguidores seguían en busca y captura. Los ciudadanos de bien no tenían plena confianza en las nuevas autoridades. ¿Cómo hacerlo si se rumoreaba que uno de los Kages seguía a los Akatsuki? Habían metido la pata hasta el fondo.

Kakashi Hatake había asumido el puesto de Hokage, posteriormente, al celebrarse las elecciones, volvió a salir victorioso, asentandose en el poder. El buscaba restablecer la paz y el orden, por eso Hinata Hyuga comenzó a trabajar como AMBU. Confiaba en Kakashi, en su visión política, aunque no compartiera su decisión en cuanto al acto de conmemoración.

Cuando el discurso del Hokage agradeció a los presentes por encontrarse allí, Hinata Hyuga supo que la pantomima había finalizado. Los ninjas se dispersaron como caudales de agua, cada uno se ocuparía de sus asuntos. Se podía apreciar como las chimeneas de las casas brindaban su humo al cielo.

Hinata Hyuga estaba acostumbrada al ajetreo de Konoha, ninjas élites, los aprendices, ninjas ya jubilados, simples ciudadanos y altos funcionarios de aquella aldea desfilaban por aquellas estrechas calles llenas de puestos de comida. A lo lejos se podía apreciar las aves con papeles en sus patas, eran cartas para el Hokage, misiones de alto rango, la vida de un Hokage es muy dura. Así era la vida en Konoha, llena de ajetreo y gente. Hinata estaba preparada para todo.

Pero no estaba preparada para encontrarse con él en ese mar de gente.

Sasuke Uchiha.

El nombre le nació en la garganta, le vibró en la lengua, íntimo y anhelado al mismo tiempo. Estuvo a punto de pronunciarlo, de ir hasta él, pero un ~Detente~ restalló en su cabeza como un látigo. Tenía que alejarse antes que sus caminos se volvieran a cruzar.

No.

Definitivamente eso no podía suceder.

Porque encontrárselo significaba ser engullido por la niebla del pasado, significaba rememorar los errores, lo que había hecho y, sobre todo, lo que había sucedido con Sakura Haruno

Duelo por los vivos (Sasuhina) ~TERMINADA~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora