Luz y Oscuridad «NarakuxKagome»

Capitulo N°4| Despertando Un Deseo Hacia Ti.

*Narradora*

Despues de que la anciana kaede, se despidio de todos los chicos, el grupo de inuyasha comenzaba con su busqueda de los fragmentos junto a otra nueva integrante, nada mas y nada menos que Kikyo La Sacerdotisa Revivida.

Ahora hay dos sacerdotisas para la busqueda de los fragmentos pero una esta en contra de la miko de barro quien mas que la misma miko del futuro reencarnacion de la miko de barro, aleada del ser mas odiado por ellos y en especial al hanyou y a la miko del pasado.

Todos van tranquilos en un valle dos horas despues paran a la orilla de un rio a tomar agua y refrescar sus rostro, luego siguen su caminata por unas horas mas y llenan a una llanura llena de flores y en eso el tiempo pasa y llegan a una aldea que la mayoria habian mujeres, los hombres apenas y se contaban con una mano, los que se podian ver.

- ¡Santo Buda!.

Exclama miroku que mira a todas las mujeres con la boca abierta, ya que todas tiene una belleza sin igual.

- ¡A No, excelencia deje la lujuria.

Grita sango y jala la oreja del monje de tunicas moradas y la esterminadora lo mira con uno enojo muy propio de la ocacion.

- Sanguito no soy yo, son estos ojos que estan malditos.

Se escusa miroku siendo bien agarrado por la tailliya.

- ¿Ahora son los ojos, no que era la mano?

Contra atac,a dejando al monje sin argumento alguno

- No siento ningun fragmento.

Dice seria kikyo alado de sango, con los brazos metidos en las mangas de su kimono.

- !Quien te pidio tu opinion!.

Susurra shipoo en el hombro de kagome, mirando con odio a la miko de barro.

- Shhh shipoo no digas eso..

Le susurra igual kagome, para que ellos dos solo supieran lo que hablan, aunque era oido por un chico con orejas de perro que no le toma mucha importancia.

- Es verdad lo que dice kikyo, no hay fragmentos, Pero ya esta haciendose de noche ¿porque no pedimos estadia aqui por esta noche?.

Habla kagome mirando a todos y luego a inuyasha.

- Vamos, hablar con las mujeres, para que nos den posada..

Expresa inuyasha y empieza a caminar a la entrada de la aldea.

- ¡vamos!

Grita shipoo bajandose del hombro de kagome y siguiendo a inuyasha.

Todos siguen a el pequeño kitsune y al hanyou al interior de la aldea.

Las mujeres miran a inuyasha y empiezan a susurrar ciertas cosas que son escuchadas por las sensibles orejas de inuyasha y las de shipoo, las mujeres dicen cosas como estas : "Hay que lindo" "Ojala se fije en mi" "Que lindas orejas"

Las mujeres dicen estas cosas y muchas mas, haciendo enrrojecer a inuyasha un poco y se detiene frente a una gran casa o mejor dicho castillo, todos los demas alcanzan a inuyasha y miran como del castillo sale una mujer esvelta con un kimono rojo pacion y un obi dorado como el mismo sol o del color a los ojos de inuyasha.

- ¡Oh, Un lindo medio demonio ilumina mi morada!

Sonrie la mujer de unos veinte años que mantiene una corona en su cabeza, señalando que es la reina o princesa de dicho lugar.

- ¿Disculpa, como sabes que soy un medio demonio?.

Inuyasha alza una de sus cejas

- Tus orejas lo confiezan.