REAL - Sanwoo +18

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Ambos cuerpos aplaudían con fuerza mientras San se sujetaba del kimono rojo para poder llegar más hondo, el color lo llevaba a la locura, era el color perfecto para Wooyoung en todos los sentidos, eso ya lo demostraba en el escenario con su cabello y vestuarios, pero a la hora de dejarse tomar hacia las cosas encenderse mucho más.

Las nalgas de Wooyoung estaban rojas también pues a San se le había pasado la mano con las nalgadas y así lograba darse cuenta que los trajes lo prendían más que cualquier cosa, se ponía más agresivo de lo normal y todo terminaba en gritos que en buena hora no llegaban a traspasar a las habitaciones contiguas.

Estaba demasiado excitado como para continuar por un buen rato más, necesitaba más de Wooyoung,  rápidamente quitó su miembro para voltearlo y tomarlo en brazos, Wooyoung de inmediato rodeo su cuello y San no demoró en colocar su miembro.

—San... mghmm... —Wooyoung amaba la sensación de la ancha espalda de San, sentía que este lo sujetaba fuertemente de ambas nalgas.

Empezó a embestir con dureza, Wooyoung gemía en su oido haciendo todo más delicioso, de pronto sintió las uñas de Wooyoung clavarse en su espalda, fue algo casi inexplicable, se sentía más excitado que nunca, quería pedirle a Wooyoung que deje heridas, que no se contenga y deje las marcas que quiera, pero su mente tuvo un poco de raciocinio al pensar en que tendría que usar nuevamente ese traje que dejaba a la vista toda su espalda.

—Wooyoung... amor, no... —Gruñó sobre sus labios pero no era capaz de terminar la frase pues era demasiado placentero sentir un poco de dolor mientras su miembro gozaba del agujero de su novio.

—Sannie... —Susurró Wooyoung dejando que sus uñas arañaran toda su ancha espalda mientras su respiración excitada en el cuello de San volvía a este loco.

—Mierda... no me llames así. —dijo sintiendo que esa era una forma demasiado dulce de llamarlo cuando toda su ropa gritaba cosas demasiado insanas y la pureza era lo que menos le daba, era demasiado sexy y lo ponía al borde, lo sabía, no duraría más y las uñas de Wooyoung no ayudaban, ni su forma dulce de gemir, sus cortos besos por su cuello lo estaban matando.

Sus pieles chocaban fuertemente, y la pelvis de San se empezó a mover en un vaivén desenfrenado, casi arrítmico por lo brusco que le daba.

—Aghmm... Woo... —llegó a un punto que jamás creyó, no entendía como el sexo se podía poner cada vez mejor con Wooyoung.

Su cuerpo ardía y estaba tocando el nirvana, pero todo fue más exquisito al sentir su abdomen llenarse de la esencia de Wooyoung y un grito agudo que hizo su espalda contraerse, las uñas de Wooyoung se clavaron profundamente y su miembro explotó dentro suyo, sentía que era un orgasmo lento y delicioso.

Lo colocó en la cama viendo como su pecho subía y bajaba, la diminuta ropa interior roja con encaje junto al choker que había arrancado con agresividad cuando le daba en cuatro se encontraban en la cabecera de la cama.

Wooyoung continuaba con las piernas abiertas sacando el líquido blanco de sus rosados cachetes, San no pudo evitarlo, tomó su miembro y lo metió para darle unas últimas estocadas, Wooyoung se sorprendió mucho pues San ya se había corrido dentro, pareció ser lo último pero San terminó por moverse un poco más entre sus piernas antes de caer rendido sobre este.

—Si sigues usando esos trajes vamos a terminar así cada concierto, se supone que no tenía fuerza para nada. —Le susurró, esto era en cierto punto verdad, tan pronto llegaron San se baño y le dijo que no sentía sus piernas, pero Wooyoung salió del baño con el kimono, la ropa interior pequeña, el choker y unas medias rojas coquetas y translúcidas.

—Me calenté un poquito. —le dijo juguetón.

—¿Un poquito? —San rió sobre sus labios—saliste del baño y básicamente me pusiste tus preciosas nalgas en el rostro—dijo tomándole una de las rojizas nalgas para apretarla a su gusto.

—Eso no es cierto —Bien, lo que acaba de decir podía ser en parte verdad, lo vio recostado y se sentó encima suyo colocando sus posaderas sobre el pecho de San dándole la espalda, pero en su defensa fue San quien lo tomó de las caderas para posicionar las nalgas de este sobre su rostro—, eso si lo hiciste tú, mi plan solo era chupartela, tú mismo te metiste allí.

San rió, bueno, en efecto cuando vio que su trasero estaba a su disposición no pudo evitarlo, su lengua parecía sedienta de su cuerpo y terminó por comerle todo lo que había estado deseando por horas durante el día.

—Amor, estás en tu era de stripper, tenía que aprovechar un poco ¿no crees? —Le dijo Wooyoung antes de besar su mejilla.

—¿Era qué? —San rió— nada de eso amor, solo es un baile.

—No dijiste eso en el hotel aquella vez. —Le dijo coqueto sintiendo como las manos de San pasaban con suavidad por sus caderas delineando su hermosa figura, sus pezones continuaban erectos para delicia de San.

—Eso si era un striptease —su lengua pasó por el pezón de Wooyoung,  lamió con lentitud disfrutando de sentir como Wooyoung torcía las caderas.

—San... ya debemos parar. —Le dijo al sentir que este empezaba a chupar con ganas.

—Eres demasiado hermoso Young-ah —terminó por decir al acercarse a su rostro.

—Tú no. —Dijo juguetonamente antes de huir de sus brazos rápidamente, se sentía alegre, quería molestarlo porque después de tanto podía usar uno de los trajes que se moría por usar, y tenía la atención que quería de San.

—¡Ya! ¿Qué insinúas? —Dijo antes de atraparlo de las caderas y volverlo a poner debajo suyo.

—Es una bromita San —dijo al ver que no tenía escapatoria y no había cosa que le encantará más, lo tomó del cuello para acercarlo y susurrarle en el oido—, la verdad es que eres el hombre más guapo que he conocido. Muy pero muy guapo.

San sonrió, amaba cuando los halagos de Wooyoung salían con tanta naturalidad.

—¿El más guapo? —empezó a besar por su ombligo. Wooyoung contrajo el abdomen por la sensación tan cálida que generaban los labios de San.

San se enderezó, sabía que debían limpiar todo para ya poder descansar.

Se dirigió al baño cuando Wooyoung exclamó:

—Sannie, creo que ammm —susurró cubriéndose la boca. San se volteó de inmediato.

—¿Qué sucede?

—¿Volverás a mostrar tu espalda? —preguntó Wooyoung con preocupación en el rostro.

—Ya lo supuse —Sonrió tratando con una mano de observar algunos de los arañazos, para su suerte estaban por la parte superior, sabía que iba a arder los siguientes días—, no te preocupes, de ser así lo cubriremos con maquillaje, nadie se dará cuenta. —Dijo antes de acercarse para dejar un beso en los labios de Wooyoung.

—Está bien, supongo que deberíamos ducharnos nuevamente. —Le dijo parándose para alcanzarlo en la puerta.

San lo tomó en brazos y entre risas se adentraron para una larga ducha, terminaron por notar que era media noche y debían levantarse temprano. Lograron dormir unas horas, todo estaba en calma, todo estaba bien.

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Hola bebés, consideren estos capítulos extras, jajaja escribí dos XD no tienen sección de lo real. Y si hubiera quizá sería lo de la vestimenta de San, su último outfit mostrando la espalda.

Estos días estuve lidiando con mucho estrés y pensé escribir cositas extras para librarme un poquito de la realidad. Serán capitulos cortos y soft así que espero les guste.