Mi cabeza dolía, todo era tan difuso y borroso, intente abrir mis ojos pero solo puede abrir uno, lleve mi mano a mi ojo intentando saber que pasaba, roce mi dedo con este y un dolor me punzo la cabeza, !tenía el ojo hinchado¡, intente aguantar el dolor hasta que cai en cuenta ¿donde estoy?
Me alarme, intente ponerme de pie pero me sentía débil y mareada, con ayuda de mis manos me sujete a las paredes y me pare, agudize la vista de mi ojo bueno y pude ver que me encontraba en una habitación, muy oscura y sucia, pude observar un colchón algo gris por la suciedad y lo que parecía ser una llev y un retrete.
Mi respiración se aceleró cuando vi no reconocí el lugar, visualice una puerta, era lo que parecía ser metal, me acerque a ella a pasos apresurados y empeze a golpearla con fuerza.
¡ayuda! ¡AYUDA!- Repeti varias veces pero al perecer no hubo respuesta, me aleje un poco de la puerta y empecé a intentar calmarme, las lágrimas espezaban a salir de mis ojos, mi corazón empezaba a latir con mucha fuerza y mi respiración se empezába a agitar de nuevo.
Esto no podía estar pasando, no, no, no, no, mi mamá tenía razón, debía tener más cuidado cuando saliera de casa, esperaba que ahora estuviera preocupada, buscándome, pero ni yo misma sabía dónde me encontraba, necesito salir de aquí, me alarme cuando escuche un rechinido, mire a la puerta y estaba estaba abriéndose.
La luz proveniente de la puerta me cegó, una silueta entró a la habitación y prendió un foco, que no había notado, tal vez por los nervios, me tape los ojos con las manos esperando a que estos se acostumbraran a la luz y cuando lo hicieron, voltee rápidamente a la silueta y entonces lo vi.
Era el.
El profesor Damián, suspiré aliviada y me acerque a él.
¡profesor! Que alivio que es usted, por favor tiene que sacarme de aquí, necesito ir a casa, mi mamá debe estar muy preocupada- exclame mientras lo agarraba del brazo y lo empezaba a dirigir hasta la salida de este sucio cuarto.
Pero el no se movió ni un poco, solo volteo a verme y me sujeto muy fuerte del brazo y me contestó.
Tu no te iras de aquí, tu hogar es este- me dijo con voz dura.
Pero profesor, esta no es mi casa, no tenemos sotano- no lo entendia debería llevarme a casa o dejarme salir de aquí, esto empezaba a darme más miedo.
El profesor sólo soltó una corta carcajada y cuando se detuvo me dijo- ay mi dulce Eymi, no entiendes, estas en mi casa, nuestra casa y tu no te iras de aquí.
Ahora todo tenía sentido
holaaaas, esta es mi primer historia, pido comprensión y apoyo, aun soy nueva en esto y prometo mejorar espero les guste este primer capitulo y perdonen las faltas de ortografía.
Muchas gracias por leer y darle una oportunidad a mi historia, si tienen alguna idea o sugerencia por favor comentarla bay baaaaaaay :).
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sola
RandomNo se cuando como llegue a manos de el, solo se que debo escapar de aquí, no me gusta como me mira y como dice amarme cuando es mentira, el me lastima, sus caricias no me gustan y sus "juegos", quiero que me deje sola de una vez por todas.