Naruto corría riendo mientras huía de los enfadados comerciantes a los que les había pintado sus tiendas y restaurantes.
Uno de los malos hábitos que había adquirido para llamar la atención de los demás era realizar diversas trastadas, entre las que destacaba pintar cosas, como los rostros de los Hokage o casas.
Sobre todo, aprovechando cuando Aimi no estaba en la aldea.
Aunque aquel revoltoso rubio no contó con que la pelirroja llegaría antes de lo previsto de su misión.
Mientras caminaba de regreso de su larga misión, deseando poder descansar un poco, Aimi pudo oír un gran alboroto e, imaginándose qué podría ser, decidió asomarse, encontrándose con una calle entera pintada y las personas cabreadas.
Personas, las cuales murmuraban horrorosidades sobre aquel pequeño, las cuales Aimi tenía que escuchar y hacer cómo si no le importase.
Con un profundo y cansado suspiro, cambió su serio rostro a uno con una sonrisa apenada mientras comenzó a disculparse, como siempre tenía que hacer.
—¿Quién va a arreglar esto? ¿Ahora cómo hacemos para abrir? ¿Quién va a pagar por sus trastadas?— preguntaban cabreados los afectados por la broma de aquel rubio.
Tal vez ellos no se habían percatado, pero siempre había una persona que respondía por los actos del rubio.
— Perdón, ahora mismo lo traigo y limpiamos todo. Perdón— se disculpaba aún con la sonrisa forzada en su rostro, mientras dejaba un kunai en el suelo y se teletransportaba enfrente de Naruto.
— Aimi-nēchan...— saludó sorprendido y algo temeroso al ver a la Jōnin frente a él—. Has vuelto antes— añadió con una sonrisa culpable.
De todos los ninjas de la aldea, la que más rápido le pillaba siempre era Aimi.
— No creas que te vas a librar— murmuró con cabreo mientras le sostenía y veía cómo él comenzaba a patalear, tratando de librarse de su agarre.
Al segundo se encontraban de nuevo en aquella calle y comenzaron a limpiar todas las pinturas, ambos juntos.
Naruto observó lo cansada que se veía la pelirroja, pero aun así se quedó allí, con él.
Pero también era la única que se quedaba junto a él, ayudándole a deshacer sus tratadas.
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ℂ𝕒𝕕𝕖𝕟𝕒𝕤 || Hatake Kakashi ||
FanfictionLa unión de una cadena es fuerte, aunque no imposible de romper. Pero no es algo que uno no pueda arreglar con esfuerzo y tiempo. Todas las cadenas que les unían a las personas importantes comenzaron a romperse. Pero... al menos quedaba una. Él fue...