Ohhh, The Luthor Legacy

Ohhh, marca Luthor

Estaba ya iniciando la noche del día siguiente y Kara estaba en su departamento, en su cama, recordando felices momentos con una pequeña sonrisa, dentro de todo, por supuesto, de cuándo ella había estado con Lena y a la par, un poco sin aliento por la confusión enorme de Lena.

…

- Hola Lee – le había saludado Kara sentándose a un lado de ella, en el sillón al lado de ella cogiendo su manita, y viéndola aún descansado.

Ella recordando el minuto en que le conoció y ella, Woahhh, la impresionó, ya que, por la descripción de su primo, ella esperaba ver a una maniática psicópata o sociópata y en cambio no vio nada de aquello.

Lena había sido todo lo contrario que alguna vez pudo pensar y ella dio muchas gracias a todo lo que es bueno en el mundo por aquello.

...

- Hey – le dijo suavemente al notar que sus párpados se movían cómo queriendo despertarse – hola hermosa – le saludó sonrojada por lo mismo, ella nunca se había referido así a Lena, pero sí que había querido decirlo hace mucho.

Lena poco a poco siguiendo la voz de Kara se despertó, al inicio un poco dispersa ya que se estaba orientando por el sonido de su voz a encontrarla

- Hola, hola, estoy aquí Lee – le dijo Kara parándose y quedándose quieta frente a ella, para que le pueda ver – hola – repitió con gran sonrisa al ver que Lena le identificaba y su mirada brillaba al reconocerle – hola – repitió por segunda vez maravillada de ver un pelín de felicidad en los ojos de su Lee.

Eso hasta que ella trató de moverse, formándose en ella un gran ceño confuso al no poder hacerlo con toda la libertad que tenía antes – oh boy – se quejó Kara intentando no entrar en pánico - ¿Lena estás consciente de lo que te ha pasado? – le preguntó - ¿el médico te lo ha explicado? – le preguntó viendo un inicio de pánico en ella, Kara le dio un apretón de manos y un besito en cada ojito susurrándole – te lo voy a explicar, no tengas miedo, te lo voy a explicar mi Lee – rogándole que tenga un pelín de tranquilidad.

Y Lena por más que estaba asustada, y con muchos aparatos encima, al estar junto a Kara, estuvo de acuerdo, ella no debía tener tanto miedo si estaba junto a su Kara.

- Ok, voy a llamar al médico ¿sí? – le preguntó y sin esperar respuesta lo hizo.

El médico entró después de unos minutos, mirando a Kara por la razón, quién al ver la mirada de ambas, comprendió el porqué.

- Hola Lena, soy el doctor Jack, ¿te acuerdas de mí? – le preguntó con mucho cariño al conocerla desde los cuatro años

Cuándo por primera vez Lilian le trajo al hospital por un chequeo, pensado ella que era el mismo método que con un perro recogido en la calle y que acabas de adoptar, dónde la primera línea de combate es llevarlo al veterinario a ponerle todas las vacunas que no le pusieron y a checar que no contagie a nadie.

Porque claro, sólo para Lilian aquella situación era igual.

Burdo e irreal, pero así había sido el primer contacto de Jack con Lena, incluso a pesar de los años Jack no seguía por comprender totalmente lo insólito de su primer contacto.

- No puedes mover la cabeza, te lastimarás con el collarín, así que ideemos una manera de comunicarnos ¿está bien? – le preguntó auscultando con una linterna sus ojitos, buscando el reflejo de sus pupilas – un parpadeo es para "sí" y dos para "no" ¿entiendes? - preguntó"

- Sí – contestó Lena con un parpadeo

- Ok, muy bien – le dijo Kara con una pequeña sonrisa haciendo que Lena la mire con un brillo hermoso en su mirada.