Donde Seokjin es porrista, un poco torpe fuera de las rutinas, amante de los chocolates y cosas femeninas.
Y
Donde Jungkook es el capitán del equipo de fútbol americano.
O donde un Jungkook enamorado convence a Seokjin de fingir una relación con é...
El entrenamiento de Jungkook había terminado más temprano de lo habitual con su entrenador corriendo hacia el baño porque en palabras de él.
"Malditos burritos de la cafetería."
Jungkook se acercó al área de los porristas, viendo como estos trabajaban en la nueva coreografía del próximo partido, todos siguiendo a Jin y Jisung quienes se sonreían y hablaban juntos.
—¡Es una gran idea, Jinnie! —dijo Jisung emocionado y le mostró el paso a los demás del equipo.
Jisung era asombroso.
No tanto como Jin, pero era asombroso.
Era amable, le gustaba reír con los demás y de verdad quería a Minho, compañero de americano de Jungkook.
Jin al ver a Jungkook lo saludo emocionado y corrió hacia él dándole un abrazo.
—Hola, Jungkook. —se acercó a la oreja del alfa. —les dije que me gustabas y ahora éramos amigos, ¡créeme estamos ganando esto!
Jungkook sonrió y disfrutó del aroma del omega y la mirada de felicidad de los demás omegas en el equipo de porristas.
Realmente eran muy amables, siempre odiaron ese cliché absurdo acerca de que los y las porristas eran los principales en molestar a los demás alumnos, siendo ellos quienes empezaron una campaña anti-bullying, donde Jin fue su principal defensor.
—Eres perfecto. —dijo Jungkook sin pensar.
Jin se alejó confundido y sonriendo divertido.
—Tú también, Jungkook. —Jin se acercó otra vez a susurrar. —Ahora dilo un poco más fuerte para que te escuchen.
Jungkook lo hizo y Jin sonrió feliz para correr otra vez con su equipo y seguir entrenando.
Fueron 30 minutos de Jungkook sufriendo y al mismo tiempo estando en el paraíso.
Santo dios, se iría al infierno.
¿Cómo culparlo?
Jin frente a él, bailando, moviendo esas hermosas caderas, usando una falda corta que podía jurar se movía de la forma más perfecta del mundo.
En este momento Jungkook está atravesando ese momento y lo único que su mente quiere es sexo y sumemos el hecho de que su alfa está enamorado de Jin.
¡Jin es perfecto!
Sus lindos ojos llenos de emoción.
Sus labios manteniendo la más hermosa sonrisa en este mundo.
Su cabello suave moviéndose junto con él.
Y su cuerpo tan hermoso.
De verdad Jungkook adora a Jin.
Al final el entrenamiento de Jin termina por lo cual se acerca a Jungkook quien está como tonto viéndolo.
Los labios de Jin se movían rápido, pero Jungkook los veía tan hermosos que se veían en cámara lenta.
