Persona menos desagradable

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Los sonidos de bolígrafos siendo arrastrados por encima del papel eran sofocantes para todos en el salón de clases, especialmente para aquellos que esperaban el toque de la campana. Bruce estaba sumamente concentrado tomando apuntes, tanto que no era capaz de notar la mirada llena de odio de Eddie. El joven de ojos olivo estaba jugueteando con su bolígrafo, moviéndolo de arriba abajo en un ritmo extremadamente rápido.

— deja de hacer eso — susurró Arturo en el oído de Nashton — si el profesor Carmona nota como te le quedas viendo al ancianito, te regañará por no estar tomando apuntes.

— Confirmo — susurró Harley — ya conoces a este profe, no dejará pasar una oportunidad para desahogar su enojo con un alumno.

— el profesor Carmona puede irse mucho a la mierda — Masculló Nashton, todo esto lo decía sin apartar su mirada de Bruce.

— no creo que el profe tenga tu dirección, Eddie — susurró el chico de nariz rara.

Las palabras de este joven fueron más que suficientes para desatar la risa nasal de Arturo y la gran risa escandalosa de Harley. Nashton entró en pánico, pues cada uno de sus compañeros voltearon a ver a su grupo de amigos, entre todos ellos estaban las miradas curiosas de Selina y Bruce. Este último no miró a los dueños de las risas, si no que miró a Eddie, llevándose la sorpresa de que él lo estaba mirando desde antes. Nashton se puso rojo de la vergüenza, dios, seguro que ahora quedaría como un acosador, y todo gracias a sus ''mejores amigos''.

— Joven Fernandez, señorita Quintana — exclamó el profesor de matemáticas, se le veía furioso por el gran escándalo que aquella pareja había creado en el salón. Eddie solo rezaba para que ninguno de los dos delatara la causa de sus risas — se podría saber, ¿Cuál es el chiste que los hizo retorcerse de esa forma? Creo que hablo por todos en el salón cuando digo que queremos que nos lo cuenten.

— oh, no es nada, solo se nos hizo muy gracioso que a Oswaldo se le salió un pedo — contestó Arturo, ganándose una mirada de desprecio por parte de su amigo con nariz de ave — ¿Qué? No me mires así, sabes que no le puedo mentir al profe Carmona.

Sorprendentemente, el profesor no insistió con el tema y siguió dando su clase, solo que esta vez prestaba un poco más de atención al lado del salón donde estaba la pareja. Esto hizo imposible que Eddie pudiera mirar a Bruce con desprecio, pues de ser sorprendido, se llevaría un regaño por parte de su profesor.

Tan solo pasaron veinte minutos hasta que el sonido ensordecedor de la campana inundó el aula de Nashton, aquello no solo anunciaba el final de la clase, sino que también era la señal para salir de la escuela, pues el día escolar había terminado. Eddie se apresuró en tomar todas sus cosas para poder guardarlas en su bolsa. Como ya era costumbre, todos sus amigos tomaron caminos separados, siendo Harley y Arturo los primeros en irse, Oswaldo no tardó mucho en retirarse de ahí, dejando en el salón al de ojos olivo. Solo quedaban un par de personas además de él, siendo su mejor amiga una de ellas. Antes de hoy, justo el semestre pasado, Selina se acercaba a él para poder hablar mientras él se encargaba de guardar sus cosas. Ahora, le hervía la sangre de solo ver a Selina haciendo todo eso con Bruce, como si él ya no se mereciera dicho trato.

— ya lo verás, un micro es como un bus, pero más chiquito — explicaba la de piel morena, Bruce solo se dedicaba a escucharla mientras acomodaba sus cuadernos dentro de su mochila — ojalá pudieras venir conmigo, pero es obvio que vamos para barrios diferentes.

— y, aunque quisiera acompañarte, se me haría imposible — el joven de ojos azules terminó de guardar sus cosas, cerró su mochila y se la puso en los hombros. Todo esto lo hizo con una sonrisa, solo fue necesario un día para que Eddie pudiera odiar esa sonrisa — Alfred vendrá por mí en el auto, mis padres no quieren que me escape de mi castigo.

¡No quiero ir al conalep! || AU RiddlebatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora