la vida de una adolescente en un Apocalipsis continúa, y esperemos que siga siendo así ya que no queremos más muertes y menos la de la protagonista.
Problemas y celos se acercan, al igual que muertes, pero también amor y más.
Mate a dos caminantes más con ese cuchillo, las lágrimas no dejaban de salir, después fui a buscar a Jonathan, a ver si seguía vivo.
—¡Jonathan!— dije mientras entraba a su celda, el estaba bien, no se notaba tan enfermó pero realmente no se podía ni mover.
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—Katie, no te me acerques.. pero ¿y Henry?— pregunto por su hermano mientras tosía sangre —Murió.— conteste con sinceridad con lágrimas en los ojos cayendo aún.. miré hacia abajo sin recibir ninguna respuesta de el, cerré su reja y me fui para continuar matando a los caminantes.
Al alejarme de ahí escuché un disparó detrás de mi y era Maggie que había matado a un caminante. —¡Katie! ¿Y Jonathan?— pregunto preocupada—El esta bien, esta en la celda de allá.— dije mientras la señalaba, ella inmediatamente fue hacía ella y sin más que hacer fui con Glenn.
Abrí las rejas y entre con el con no se si era el cadaver de Glenn o Glenn.
Me senté con el mientras lo veía llena de tristeza, rezando para que solo fuera un desmayo.
Decidí hacer algo que cualquier persona en su sano juicio hubiera echo antes.. escuchar sus latidos, al acercarme a su pecho sentía sus latidos super acelerados, al escuchar eso mi corazón se alivio y ya no sentía tanta ansiedad ni presión.
—¡Papá!— escuche gritar de Maggie.. vi la salida de la celda por unos segundos, pensé en ir a ayudar pero luego vi a Glenn, decidí quedarme con Glenn, probablemente hershel estaba en problemas pero no iba a dejar solo a Glenn, otra vez.
Fue cuestión de segundos al ver a entrar a Hershel por la entrada de la celda, hizo algo que lo despertó rápidamente pero los sonidos que hacía Glenn eran de ahogo.
—Hershel por favor sálvalo.— dije rogando con los ojos llenos de lágrimas.
Hershel me indicó algunas cosas y las hice mientras el le metía un tubo por la boca.
—Quédate con nosotros.— le dijo Hershel a Glenn. Al escuchar eso mire algo confundida y más triste a Hershel.. o sea que todavía había opción de que Glenn se fuera.
Hershel no dejaba de repetir—Quédate con nosotros.— y yo no dejaba de llorar mientras tenía una de mis manos en su pecho y otra en su barbilla.
Escuche unos ruidos en la entrada de la celda y era Lizzie viendo todo —Te dije que te quedaras en la celda.— dijo Hershel sin dejar de darle la medicina a Glenn. —¿Ya se acabo? ¿Por que Katie sigue llorando?— pregunto Lizzie mirándome con lastima.
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