Xiao Zhan es un neurocirujano con una carrera perfecta, hasta el día en que vió a su prometido perder la vida ante sus ojos, con quién había compartido cuatro años de su vida. Con el corazón roto y miedo a que la historia se repita conoce a Wang Yib...
La depresión de Zhan lo había llevado al punto de no ser una persona funcional, había perdido su vida social, su trabajo, se aisló del mundo, comía pocas veces y en algunas ocasiones se levantaba de su cama, la depresión con la que vivía lo había llevado incluso a tener pensamientos suicidas.
Zhuo Cheng siempre apoyó a zhan, hasta poder convencerlo de ir a terapia por su propia cuenta, luego de muchos meses en terapia, medicamentos y apoyo de sus personas queridas, al fin comenzaba a ver una luz de esperanza.
La terapia le habia servido también para aceptar que la muerte de Bowen no había sido su culpa, debía ser más compasivo consigo mismo, la perdida de pacientes no lo hacía mala persona y mucho menos un mal médico.
Luego de dos años de la muerte de Bowen, aún seguía en contacto con su madre, la señora Yuan había sido como una segunda madre y todo ese tiempo estuvo siempre para él.
- Me alegra que estés aqui, pensé que no vendrías.
- Para algo tan importante como ésto debia estar aquí.
- Creo que es a ti a quien le corresponde, al final de cuentas eras su prometido.
Con unas cuantas lagrimas acumuladas recibió la pequeña urna donde descansaban las cenizas de Bowen. La abrió y empezó a esparcirlas poco a poco en aquel precipicio que daba al mar, cuando terminó de esparcirlas, la señora Yuan arrojo un montón de orquídeas blancas. Ese era uno de los deseos que Bowen tenía para el momento de su muerte, pero no creían que lo cumplirían tan pronto.
- Bowen, cariño, hoy frente a tu madre creo que es hora de despedrime de ti. Te amé demasiado y por ello siempre tendrás un lugar en mi corazón, pero es momento de decirte adiós y darte las gracias por esos maravillosos años a tu lado, fui la persona más feliz del mundo durante ese tiempo, pero la vida o el destino nos separó. Aprendí a sanar mis heridas y a entender que no tuve la culpa de tu muerte -sacó de la bolsa del pantalón una pequeña cajita, se quitó el anillo de compromiso que siempre llevaba puesto y lo guardó ahí- Ahora es mi momento de volver a vivir, retomar mi vida y ser feliz nuevamente, siempre vivirás en mi mente y mi corazón. Te amé y ahora te dejo ir para que puedas descansar.
Los calidos brazos de la señora Yuan lo envolvieron, él estaba hecho un mar de lágrimas, su rostro estaba empapado por el llanto pero se sentía bien por lo que había hecho.
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- Me alegra mucho verte aquí nuevamente.
- También a mi, estoy muy feliz por regresar a trabajar luego de dos años. Sino hubiera sido por ti que hablaste con la junta directiva no habría podido regresar.
- Ellos saben lo maravilloso que eres, por eso tomaron la decisión de contratarte nuevamente, luego de que el Doctor Zhao se jubilara no encontraron ningún neurocirujano como ustedes, pero estás aqui de vuelta además como jefe de Neurología y Neurocirugía.
- Hablando de eso ¿Quién es el nuevo jefe de pediatría?
- Es Lu, no había querido decirtelo. Fue nombrada jefa de pediatría hace poco
- Entonces iré a verla, me gustaría felicitarla por su nombramiento.
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Caminaba al área infantil del hospital, observaba a los niños jugar en la zona de juegos, se formó una amplia sonrisa en su rostro, mientras una lágrima de nostalgia resbalaba por su mejilla, limpiandola con rapidez.
- Amaba verte jugar aquí con los niños, eras el mejor pediatra, Bowen.
Observaba a través del ventanal a los niños que jugabas, brincaban de aqui para allá, sus enfermedades no los detenían, cuando de pronto sintió una mano tocar su hombro.
- Hola doctor Zhan, que gusto volver a verlo, Cheng me dijo que me estaba buscando.
- Hola Lu, también me da gusto verte, si, te estaba buscando. Venía a felicitarte por tu nuevo puesto.
- Muchas gracias, para mi es un honor ser la sucesora del puesto del doctor Bowen, mi nombramiento fue hace poco y aún tengo miedo de no ser lo suficiente, es una gran responsabilidad
- Estoy seguro que lo harás bien, en este momento eres la persona más capacitada para este puesto, fuiste la mejor aprendiz de Bowen.
- Al consejo le tomó casi dos años elegir un nuevo jefe de pediatría, y hace unas semanas me lo otorgaron.
- Nuevamente felicidades, harás un excelente trabajo, Bowen estaría muy feliz y orgulloso de ti.
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Holii Discúlpenme por desaparecer tanto tiempo, pero aquí les dejo dos capítulos para compensar mi desaparición.
Espero que sea de su agrado hasta este punto la historia, próximo capítulo será el encuentro de nuestros bellos protagonistas. ♡
