Capitulo 34

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Philia dijo esto con fuerza. ¿Adónde ha ido la siempre obediente y dócil Philia? La buena y hermosa santa había caído en la ruina así.

"¿Es una elección mezclar tu carne con ese bastardo como un perro en celo?"

“…….”

El agarre en su cabello se hizo más fuerte cuando Irik miró a Philia.

"Estaba tratando de entender lo que estabas haciendo".

“…….”

“Dormí con mujeres en ese templo”.

Los ojos de Philia se agrandaron. El devoto Irik se acostó con una mujer, no, ¿mujeres?

"Estuvo bien. Ahora entiendo por qué esas personas, esos bastardos lujuriosos, estaban haciendo eso. Si esa parte en el medio fuera cortada, serían como idiotas”.

“…….”

“Y me di cuenta de algo. Uno de esos bastardos lujuriosos era yo."

“…….”

"Y tú también eras una mujer lujuriosa."

Philia se mordió el labio y miró a Irik. Irik presionó sus labios contra los labios de Philia y la besó.

No podía mover la mano, así que giró la cabeza para resistirse, pero no pudo resistir la mano que agarraba su rostro con fuerza.

El interior de su boca se abrió y la lengua de Irik empujó dentro. Un beso sucio. Philia finalmente relajó su cuerpo y aceptó su beso.

Entonces, el beso de Irik se hizo más profundo. Era tan hábil que era increíble si no se hubiera mezclado con mujeres antes, y que este fuera un beso de sacerdote.

“Uhh… mmhh…”

Su respiración se aceleró, quizás incluso más excitada por el gemido que se escapó de su aliento. Los labios ásperos del hombre, que la habían estado devastando durante mucho tiempo, cayeron.

Irik jadeó por aire y miró a Philia.

"Besarte... es más emocionante... de lo que pensaba".

“…….”

"Creo que me estoy volviendo loco. Haa…”

"Hermano, ¿por qué?"

“¿No te lo dije? Philia. Te adoré y te amé”.

“…….”

“¿Qué más voy a hacer si no eres digno de adoración?”

Philia apretó los dientes y lo miró. Irik también ha cambiado desde antes. Todo se volvió loco y cambió.

"Philia, el Gran Duque no pudo haberte dejado ir, así que debes haber huido y venido aquí, ¿verdad?"

“…….”

¿Cómo lo supo? Al ver la expresión de Philia, dijo Irik mientras olía el cabello de Philia..

"Por supuesto. Yo también estoy loco así, no hay forma de que él no pueda volverse loco”.

“…….”

“¿No tienes curiosidad? Claude Piast, ¿realmente te dejó ir?...."

“…….”

"Si viene antes de que te haga algo, es que te ha estado observando. Todo lo que sucedió es que te trasladaron a una prisión más grande que antes. No puedes escapar."

"¡No no!"

"Pero si no…"

Irik besó el cuello de Philia. Mientras luchaba, la fina ropa que vestía se hizo pedazos.

Estar Fasinado FINALIZANDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora