Capítulo Nro 1

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"de Agustín para Valentina"

"Mi querida Valentina, mediante esta carta me iré despidiendo de , recibimos la 3er alarma de que los soldados Alemanes cruzaron la línea del frente con dirección a nuestra posición, moriré luchando por nuestra madre patria, deseo que puedas rehacer tu vida, que te vuelvas a enamorar, que cuides de nuestra hija, Clara, que la ames como si fuera yo.

Te amo, esta es mi carta de despedida, espero puedas vivir tu vida con un buen recuerdo de mí, hasta siempre, tu amado, Agustín"

"06/08/1915".

Puse la nota en el buzón de entrega del ferrocarril esperando que días después pueda leer mis últimas palabras dedicadas a ella.

Luego de aquello fuí a la base general para terminar la preparación del fuerte y evitar que los soldados enemigos se hagan con el lugar.

Evacuamos de la ciudad a la mayor cantidad de civiles y estuvimos revisando las defensas del flanco izquierdo con la 2da Batería de batalla Zarista, pero aún con el campo a nuestro favor tenemos inferioridad armamentista y numérica, los refuerzos no llegarán a tiempo y se quedarán esperando a los sobrevivientes de la ciudad para enfrentarlos a campo abierto.

De pronto, cuando todo estaba con relativa tranquilidad, se empezaron a escuchar los bombardeos clásicos de los Alemanes sobre nuestras posiciones para debilitar en lo posible nuestra defensa, pero la fortaleza resistió los bombardeos, nos ponemos en las posiciones requeridas con la artillería en los agujeros del sitio de batalla, pero las unidades de reconocimiento de la 3er batería de Guerra empezaron a avistar un humo de color verdoso que por dónde pasaba marchitaba todas las flores y las plantas, era gas venenoso.

Estamos muertos, si ese gas llega a nuestras posiciones moriremos inevitablemente, así que antes de morir me puse en posición tapándome la nariz y boca con el uniforme y fui hacia la artillería, abrí fuego sobre la oleada de soldados enemigos.

Después de unos disparos de nuestra artillería llegó la respuesta Alemana, se pusieron en posiciones de ataque y abrieron fuego contra nosotros con furia, las bolas de artillería iban y venían hacia ambas posiciones, pero un bombardeo alemán llego muy cerca de mi posición, explotó demasiado cerca, me dejó sordo momentáneamente, siento como toda la adrenalina por la batalla recorre mi cuerpo, tan cerca y tan lejos de la muerte.

El 1er y el 2do regimiento de infantería Zarista empezaron a salir del sitio y se estrellaba contra los disparos de la artillería alemana, los que lograban llegar a la línea del frente cargaban con odio y furia hacia la infantería y caballería enemiga, empezó una lucha cuerpo a cuerpo donde las armas de fuego no eran más que un estorbo, y esa fué la señal que estabamos esperando.

Con mucha fatiga y escupiendo sangre debido al envenenamiento abrimos fuego con todo lo que teníamos, estábamos remontando la situación, a costa de bajas y muertos de nuestros compatriotas rusos.

En el momento en el que abrimos fuego con nuestra artillería la segunda oleada de infantería Zarista salió del fuerte con las ametralladoras para fusilar a cualquier soldado alemán que pudiera sobrepasar la primer línea, mal calculado.

Se empezaron a escuchar dos zepelines, las avionetas alemanas en el frente que cayeron directamente en la retaguardia y aniquiló nuestras fuerzas de ametralladoras, la situación está perdida.

Inició el contragolpe alemán, la segunda oleada de infantería de cuerpo a cuerpo entró como una avalancha, rápidamente comenzamos a perder terreno, la artillería estaba a su máxima potencia pero aún así retrocedimos cada vez más.

Luego de eso me desvanecí, probablemente por el envenenamiento del gas, en ese momento aún podíamos ser atendidos y salvados, pero con los soldados Alemanes avanzando sobre nuestra posición era muy improbable.

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