16

532 84 48
                                    

Eran las dos de la madrugada ya cuando Nicholas volvió a la casa.

Euijoo era el único en el comedor a esa hora porque estaba sentado en la mesa terminando de hacer unos resúmenes para su próximo parcial, estaba bastante nervioso la verdad, pero no podía concentrarse del todo porque su cabeza parecía no querer dejar de maquinar con el chico recién llegado.

— ¿Comiste? —preguntó cuando lo vió pasar de reojo por el comedor, Nicholas lo miró desde la cocina mientras abría la heladera.

— ¿Te importa?

Euijoo dejó su lapicera, mirando al otro. Y Nicholas movió su cabeza para mirar el interior de la heladera, buscando qué comer.

— ¿Podemos hablar como gente civilizada?

— No tengo nada de qué hablar con vos.

— Dios, Nicho, no podemos estar peleados por una boludez.

Nicholas se encaminó al comedor, no sin antes cerrar la puerta de la heladera, mirándolo directamente.

— ¿Posta te parece una boludez que me estés tratando mal?

— Yo no te trato mal.

— ¡Me dijiste vago!

— ¡No lo dije yo!

— ¡Pero lo pensaste y lo seguís pensando!

El castaño suspiro, tirándose para atrás en la silla. Yixiang, por su lado, se encaminó al living para tirarse al sillón.

— Perdón —dijo Euijoo—. De verdad no sabía que eso te molestaba.

— Es que lo entiendo porque a veces viene como joda, yo también jodo con eso, pero te juro que no lo sentí así cuando vino de tu parte.

— Perdóname Yixi, posta no sabía que te haría sentir así.

Wang lo miró, dándose cuenta que los estudios habían sido dejados de lado por Euijoo y eso era algo imposible de lograr teniendo en cuenta que él siempre fue muy traga. Los ojitos de burbujita le miraban expectantes, con un arrepentimiento que estaba seguro no se iría por mucho tiempo. Porque Euijoo era así, un completo ser de luz, por más problemas que tuviera con otra persona siempre trataría de arreglar las cosas y si él había sido el causante de lastimar a alguien entonces viviría un largo tiempo con la culpa de haberlo hecho aún si la otra persona ya le perdonó.

— ¿Querés que te ayude con los resúmenes?

El castaño sonrió un poquito, moviendo la cabeza en negativa.

— No, ya termino.

— Dale, Euijoo.

Nicholas se levantó, caminando hasta la mesa para sentarse al lado suyo, le quitó el cuadernillo que estaba leyendo para sacarle foto a las páginas que no estaban marcadas con resaltador lila y se acercó un cuaderno que Euijoo no estaba usando.

— Así terminas más rápido y te vas a dormir de una vez, no podés estar durmiendo tan poco, te va a hacer mal.

— Como dice el lema de la facu: “en Sunshine no se duerme”.

— Dios mío —Nicholas se rió, empezando a escribir las cosas importantes en el cuaderno—. ¿También tienen de lema “no importa que te estés rebanando el dedo, fíjate de no manchar el cartón”?

— Creo que ese todavía no lo pusieron pero seguro que dentro de poco lo ponen.

Después de reírse como dos boludos que eran, se quedaron en silencio cada uno escribiendo su propio resúmen.

— Ejoo —llamó Nicholas de aquella forma en que pronunció su nombre cuando apenas se conocían, porque a Nicholas se le dificultaba un poco pronunciarlo bien. Y quedó como una forma especial que tenía de llamar al castaño.

— ¿Qué?

— Perdón, yo también me comporté como un pelotudo.

Euijoo le sonrió, dándole un empujoncito suave con su hombro.

— Te quiero mucho, Nicho, no lo dudes nunca.

Y la sonrisa capaz de añiñar la carita de Nicholas apareció, Euijoo vió un toque de color rojo en sus cachetes pero no dijo nada.

— Yo te quiero mucho más, Ejoo.

🌌

Gaku miraba con una sonrisa a un Taki del otro lado de la pantalla que estaba empezando a quedarse dormido, habían estado en videollamada desde que se encontraron en el looby del edificio, también estaba ese pibe Maki pero como que mucha pelota no le había dado. La cuestión es que consiguió acercarse más al lindo chico de cachetitos adorables y en ese momento estaba muriéndose de amor de verlo ahí tratando de luchar contra el sueño solamente para escucharlo a él.

— Entonces vino Tom Holland y le dijo a Agustín: “vos tenés ganado Gran hermano”.

Ah, ¿y por eso le ganó a Mora? —le preguntó medio dormido.

— Claro, porque Tom Holland lo banca. Taylor Swift tuiteó que escribió Karma y Mastermind pensando en Agustín y Coti.

Gaku... voy a descansar los ojos un ratito, pero te escucho eh. Vos seguí hablándome.

— Bueno, te hablo.

Taki asintió con la cabeza, cerrando los ojo entonces. Y aunque dijo que iba a hablar, Gaku se quedó un ratito mirándolo dormir, con los cachetitos abultados. No se veía tan forro estando así.

— Buenas noches lindo.

Por dios, la manera en que se había enganchado era indescriptible.












unas ganas de tener un nicho en mi vida que me ayude con los resúmenes en fin

estoy en una semana de puro estrés con entregas finales y parcial pero es la última y la próxima ya estaré más libre al fin😭 estuve escribiendo así que seguramente esté más seguido por acáa

bueno nada hybe te odio gaku te extraño euijoo a vos también etc etc nos vemos 

NEIGHBOUR. &audition auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora