¿Como no decir que ese es mi hijo? [Irondad y Spiderson]

Comienzo a revivir la historia ya vivida

-¿Lo ves?, ¿No lo dije?, Llego mamá oso señores- lo dijo a voz a lo que todos abuchearon.

-Peter- susurro en el oído del manante en modo de advertencia.

-Si bueno, que conste que ya me estaba aburriendo aquí- dijo mientras que se despedía de todos y era escoltado por el Coronel Morales y sus guardaespaldas a la salida del lujoso casino.

Ambos hombres caminaron hacia la salida del casino, una vez que llegaron el moreno decidió que era hora de el irse a casa, se volteo a ver a su amigo de la universidad con tranquilidad para despedirse.

-Oye, yo ya me voy Tones, más te vale llegar mañana, por lo menos verte el rostro de muerto viviente me tranquilizaría un poco amigo- dijo estrechado la mano del hombre mas bajo.

-¡Dulzura!, ¿Cuando yo e roto una promesa?- pregunto el hombre mas bajo con tono de ofendido

-¡Nuca!, Pero con tu racha de faltas...- dijo jugando el coronel a lo que el otro se agarro el pecho con la mano izquierda fingiendo una mueca de dolor en su rostro.

-¡Me ofendes mamá oso!-  dijo el a lo que el hombre moreno se va solo negando con la cabeza y con una sonrisa en su cara.

Una vez que el Coronel se retiro, el joven empresario fue escoltado por sus guardaespaldas hacia su muy moderno auto, uno de ellos se adelanto, ese era Flash Thompson, el hombre había tenido una vida de mierda después del chasquido, perdió a la única persona que se preocupaba por él, su madre, según sabia por boca del mas alto era que ella era un amor de mujer, pero su padre, ese era otro barco que ni él quiso abordar.

Recordaba una vez en la que el fue a un bar, muy bueno a decir verdad, estaba allí el hombre limpiando mesas y recogiendo vasos, el hombre lo había reconocido, no como el Famoso Anthony Parker, sino como el antiguo chico de la segundaría al que llamaba de forma despectiva como "Penis Parker" 

- ¡Valla!, h-hola Pe... digo Tony... ¿ese es ahora tu nombre no?- dijo el cuando se acerco a su mesa donde estaba el con un grupo de hombres y mujeres que no paraba de coquetiarle.

-¿Como que ese es mi nombre ahora?, Guapo siempre a sido mi nombre- dijo el sonriendo coqueto el sin darse realmente cuenta a quien realmente le estaba hablando.

-No, que yo recuerde y por siento hombre tengo buena memoria, tu nombre era Peter, eras el chico nerd de la segundara a la que yo solía fastidiar- dijo el hombre mirando con una ceja alzada al manante, el cual frunció el ceño y lo volteo a ver sobra la montura de sus lentes de sol

-¿Flash?- dijo el mas bajo mirando con los ojos muy abiertos al mesero del bar -Valla hombre años sin verte, ¿como van las cosas?- pregunto acomodando los lentes de sol tratando de fingir calma.

La cosas terminaron en una conversación privada dentro de uno de los autos más caros en los que el mesero jamas había pensado estar, obvio hubo muchas disculpas por cosas pasadas y para sorpresa del más alto un contrato de guardaespaldas en entrenamiento entre sus manos, que para gusto del genio millonario el mesero del bar acepto casi llorando de alegría por salir del lugar de mierda en el que estaba antes.

Así es como terminaron aquí, el alto siendo el guardaespaldas líder, el mas cercano al genio, que ahora le abría la puerta del auto lujoso fuera del casino más prestigioso de todas las Vegas, el hombre le sonrió con calma a lo que el castaño el devolvió la sonrisa.

-¡Oiga!, Espere señor Parker- una voz gruesa de un hombre lo freno, el castaño sabia que los otros tres guardaespaldas lo frenarían antes de que lleguen a él -Mi nombre es Edward Brock soy reportero del Daily Bugle-