Capitulo 7
El lunes por la mañana Rei llegó a su oficina y lo primero que hizo fue llamar al abogado de la empresa, le contó a grandes rasgos y sin dar los detalles más personales de su terrible fin de semana, también de su falso divorcio.
- Creo señora Shields, que tenemos un caso aquí
- no te burles Samuel, soy Reiko Hino, no lo olvides.
- Lo lamento, es que...es raro, no sé cómo llamarla, pero lo que si sé es que si lo desea podemos demandar a su esposo, lo demandaremos tanto y tan profundamente que le dolerá el trasero y no sabrá qué hacer con eso. Le quitaremos todo lo que tiene y...
- No, Samuel...no es lo que quiero
- me dijo que estaba furiosa, que estaba enojada con él y...
- no quiero enviarlo a la cárcel, ni llevarlo a la ruina, solo quiero el divorcio.
- ¿de verdad?
- ¡claro que de verdad! ¿no ve que estoy furiosa con él?
- furiosa pero no quiere demandarlo
- no
- ni quitarle su cédula, ni quitarle el dinero ni arruinar su vida
- solo lo quiero fuera de mi vida
- aja
- no me mires así, Samuel...soy sincera
- ¿al menos quiere quitarle el coche? tiene un coche precioso
- nada, no quiero nada de dinero...solo quiero estar segura de que soy libre
- supongo que si lo presiono accederá a firmar.
- lo sé. Por favor, hágalo...necesito que él salga de mi vida definitivamente, sobre todo antes de mudarme a Londres.
- ¿lo hará?
- Si, así será. Quiero a Darien fuera de mi vida, firme o no la anexión me mudaré a Londres
- Pero su empresa es muy buena, ha crecido mucho, quizás se está adelantando
- no me estoy adelantando, quiero estar lo más lejos posible de ese hombre
- como usted lo diga, señora...señorita Hino, la mantendré informada.
Consultorio de Darien Shields, una semana después.
La enfermera mayor se encontró con la mirada fija en el joven de ojos azules que contemplaba un emparedado de tocino que no había ni tocado.
- así que usted le mintió a su esposa
- si, Fran...si...
- ¿cómo pudo ser tan cabeza dura? ¿tiene idea de qué es lo que más detestamos las mujeres? ¡detestamos que nos mientan!- refunfuña la mujer mayor golpeando el hombro del médico
- lo sé, pero no podía dejarla alejarse
- no, usted la alejó, Doctor. De verdad lo ha arruinado, así que haga algo al respecto
El médico se encogió de hombros y tomó el emparedado para darle una mordida, Fran se lo arrebató de las manos.
- oh no, no más tocino para usted, doctor. No mientras no resuelva las cosas con la señora Shields
El hombre le mostró a la enfermera una carpeta color amarillo, la mujer mayor la tomó
- ¿divorcio?
- ella buscó su propio abogado, ni siquiera contesta mi llamada.
- ¿la juzga? Yo le hubiera realizado muchas operaciones sin anestesia
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De Nuevo tú
Romancecuando pensé que había logrado Sacarte de mi vida. Cuando pensé que podía comenzar de nuevo, alguien llega; alguien que transforma todo, alguien que me obliga a decir "De nuevo tú"